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Análisis de personajes

Laura: Una chica que creció bajo la tutela de una abuela irresponsable y viciosa. Encariñándose rápidamente con las personas al tener la necesidad de que éstos sintieran los mismo hacia ella. Con una relación dependiente con su mejor amiga, única persona que estuvo allí para aconsejarla y enseñarle las cosas necesarias para la vida.

Lucero: Criada en una familia amorosa, de mente abierta y con una buena situación económica. A pesar de tener todo esto, mientras iba creciendo y su cuerpo se iba desarrollando, aceptó el hecho de que los chicos solo se interesaban en ella de forma sexual; comenzó a devolver lo mismo que recibía de parte del género masculino, por lo que nunca se enamoró y pensó que nunca nadie se había enamorado de ella, lo que le generó un dejo de inseguridad en su vida.

Oliver: Un joven soñador, extrovertido y casi considerado la oveja negra de su familia, pero no por ser mala conducta, sino por ser el más sociable de todos, saliendo a fiestas cada fin de semana y saliendo con todas las chicas que quisiera. La responsabilidad llegó a su vida sin esperarla, pero no por eso se desentendió; tuvo una hija con la supuesta mujer de su vida, quien lo abandonó con la bebé y no apareció sino cinco años después, cuando él ya tenía inseguridades, miedos y reglas que mantenían a la mayoría de las mujeres lejos.

Susana: Ella creía que todo era perfecto, una familia perfecta, un colegio perfecto, amigos perfectos y un físico perfecto. No se dio cuenta de su manía por tener el control hasta que descubrió que su familia no era tan perfecta como creía. En su necesidad por mantener las cosas a flote, se volvió aún más “perfecta” por lo que, cuando salió embarazada, no quiso manchar todo lo que había creado solo por un embarazo, así que abandonó al bebé.

Sebastián: Cuando eres el menor de tres hermanos, o te descuidan o tus padres están sobre advertidos acerca de lo que NO debes hacer. Pues los padres de Sebastián fueron los segundos, impidiéndole a su hijo hacer cosas que ellos consideraban peligrosas. Él tuvo que crecer en un ambiente dónde debía pedir permiso para ir al baño, beber agua, caminar, incluso hablar. Creció con la inseguridad de no saber si lo que hacía traería consecuencias buenas o no.

Kennedy: Huérfano de madre y padre, tuvo que crecer bajo el cuidado de su tía drogadicta quien le ocultó, al él ser un niño, todas las propiedades y el capital dejado por su familia. Creció en la calle y forjó una actitud dura y desconfiada. Al crecer y ser consiente de cada una de las cosas, descubrió todos los secretos y comenzó un nuevo camino, donde pudo estudiar y vivir cómodamente, pero solo. Conoció a un chico a quién empujó por malicia, pero lo dejó desconcertado el hecho de que éste le pidió disculpas. Lo tomó por tonto y decidió, de forma inconsciente, ser su protector. Terminando enamorado de él en secreto.

Andrómeda: La definición de adorable y perfecta.

Abuela: Una señora frustrada por no adquirir todo el dinero que esperaba de su hija.

Mamá de Laura: Una joven que se enamoró de forma inocente, quedando embarazada y siendo inmediatamente dejada por su amante. Decide tener a la bebé y buscar un mejor futuro para ambas, pero si quería hacerlo debía dejar a la niña con su madre viciosa.

Iván Hernández (papá de Laura): Un hombre sometido por su mujer.

Ignacio: Alguien frío y calculador que por dentro es dulcito e inocente.

Marcos y Ana: La definición de sexo, odio y secretos.

Aarón: Alguien que se enamoró de su hermanastra. Ni en mil años su relación iba a ser aceptada por sus padres, así que formaron un plan donde ambos mantenían relaciones amorosas para ocultar su amor.

Escritora: Alguien que deja a los lectores con finales incompletos porque tiene la esperanza de hacer otros libros.

«Inserten algo que decirme aquí»