La vez que transmigré a una novela de sementales y la volví gay

Vol 1. 2. ¿Cómo así que transmigró?

Oliver miró su puerta ahora cerrada y suspirando, cogió el libro de tapa dura que resultó ser bastante pesado, su hermano estaba realmente dedicado a esta saga. En él se leía "La Leyenda del Dragón Blanco vol. 1"; su elegante caligrafía era estéticamente agradable de ver, sin embargo, Oliver no lo leería así como así. Todavía estaba ocupado con sus novelas.

Pero su hermano había sido tan insistente, que bien que lo leyó. Después de leer todas sus novelas pendientes, claro.

Eran tal vez las 4 de la mañana una vez que Oliver terminó su lectura y estudio diario, miró perezosamente de reojo desde el borde de sus gafas al libro azul índigo que yacía en su cama deshecha, suspiró y se levantó de su escritorio para ir a su cama y acostarse.

Cogió el libro y lo miró de nuevo. El autor Moony, un seudónimo; había hecho un gran trabajo a la hora de publicar su libro, esta portada era tan bonita y el dragón blanco en ella se veía tan genial. Oliver sonrió inconscientemente mientras pensaba que los dragones son realmente bonitos.

Después de admirar la portada, luchando contra las ganas de dormirse, miró la guía de personajes. Wow, ¿Se suponía que debía conocer a todos estos personajes? Hay tantos. ¿Cómo iba a memorizar todos los nombres? Oliver se ajustó las gafas y empezó a leer el primer capítulo, que empezaba justo después de que Khorne fuera desterrado y quedara vagando por la tierra bajo el reino del cielo, que era el reino fénix.

Oliver se dio cuenta de la frecuencia con la que se había llamado a Khorne "Bello y apuesto", llevaba ocho páginas y el narrador lo había dicho ya unas veinte veces. Aunque la historia era interesante, Oliver no había dormido bien durante un mes seguido, vivir de 3 horas al día no es suficiente. Así que poco a poco empezó a adormecerse mientras leía, sus gafas se tambaleaban ligeramente contra su rostro cansado.

Finalmente se quedó dormido y esta había sido la única vez en un mes en la que por fin había dormido bien, fue rápido y sin sueños, como los que tienes cuando estás muy cansado y llegas a casa y te desmayas en la cama.

De todas formas cuando se despertó se dio cuenta enseguida de que algo iba mal, ¿Cómo es que estaba sentado en una colina de hierba verde y suave? ¿Dónde estaba su cama llena de novelas y ropa sucia? Y lo que es más importante, ¿Dónde estaba su ordenador? De ninguna manera si realmente lo hubiera perdido estaría muerto, dios, acababa de terminar el último arco de la última novela que había estado leyendo, ¡Estaban a punto de reunirse! AHHHH, estaba desesperado.

Pero espera, espera, volvamos a la parte en la que no está en su habitación? ¿Qué pasó? "Cálmate Oliver Scott, debes estar soñando o algo así, esto no está bien, sólo vuelve a dormir, tal vez te despertarás en tu habitación de nuevo" se dijo a sí mismo en un intento de no perder la cabeza por el hecho de que no estaba en su habitación, o su casa o su mundo.

"AHHH ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?" Gritó al cielo azul y soleado que iluminaba suavemente su expresión de terror.

Después de calmarse o bueno dejar de gritar decidió acostarse y pensar en lo que había hecho antes de despertar en una colina. Bien estaba leyendo bl como siempre y antes de dormir decidió leer el libro que le había dado su hermano, espera ese libro. ¿Cuál era su género? Fantasía. ¿Y dónde estaba él? En una colina, por un momento pensó que había transmigrado, dios lo que le hace a uno el no dormir.

Mientras Oliver se reía suavemente de sus propias ideas miró al cielo y por un momento pensó que tal vez esto es sólo un sueño y que debía dormir mejor en el futuro, cerrando lentamente los ojos dejó que el suave sol brillara en su rostro relajado. Hasta que una sombra se alzó sobre él, en realidad no sobre él, ¡incluso sobre la colina en la que se encontraba! Confundido, Oliver miró al cielo y vio un majestuoso dragón carmesí surcando el cielo azul. Se parecía a esas cometas que se usan en los festivales, grandes e impresionantes. El dragón debía de estar volando por ahí, ya que estaba allí sin hacer nada.

Como no parecía ver lo horrorizado que estaba Oliver, siguió volando hasta que se fue. Oliver se reía hace un momento de sus propias ideas sobre la transmigración, pero aquí está, transmigrando. ¿Cómo? No lo sabe. ¿Por qué? Tampoco lo sabe, para ser justos sólo sabe que vio un dragón y que era tan amenazante que casi se pone a llorar.

¡Mierda, realmente había transmigrado! ¿Qué debía hacer ahora? En primer lugar, ¿A dónde había transmigrado? ¿Podía realmente volver a su propio mundo? ¿Qué pasaría si muriera aquí? ¿Se acordará alguien de él? ¿Y su hermano? ¿Su familia? ¿QUÉ PASARÁ CON SUS NOVELAS?

"OK OLIVER CÁLMATE" dijo exasperado, primero tenía que averiguar a dónde había sido transmigrado exactamente; pero ¿Cómo hacerlo? Bueno, debería buscar una ciudad o algo así.

"Hola, felicidades por haber transmigrado con éxito a La Leyenda del Dragón Blanco" le dijo una vocecita desde lo alto del árbol que tenía a sus espaldas en tono frívolo. Oliver ya no aguantaba más, estaba a punto de llorar de verdad.

  Oliver se dio la vuelta bruscamente y miró con los ojos muy abiertos a la voz que se escuchaba por encima de él, resulta que la voz pertenecía a un gato naranja que le miraba desde arriba, en realidad de forma burlona. Se limitó a mirar hacia abajo a Oliver y finalmente se rió de él.

"¿Oye? ¿Estás bien? ¿Te ha comido la lengua el gato?" El gato naranja exclamó alegremente; sin embargo, Oliver se quedó viéndolo. El gato se cansó de su mirada y saltó hacia abajo, aterrizando ágilmente al lado de Oliver.

"Vamos levántate tenemos que seguir moviéndonos o si no será de noche, y oh no quieres que sea de noche créeme" ¿El gato? ¿Sistema? Comenzó a caminar cuesta abajo y hacia el pequeño arroyo de agua. Que estaba un poco lejos de la colina.

Después de su sorpresa Oliver se levantó en silencio y siguió al gato, quiero decir ¿Había algo que pudiera hacer en este mundo? En cualquier caso el gato parlante parecía más experimentado que Oliver en lo que a este mundo se refiere. Así que mejor seguir al gato, concluyó de mala gana.

"Toma, lávate la cara, parece que acabas de ver un fantasma" le dijo perezosamente el gato naranja, como lo había apodado Oliver. "¿De verdad he transmigrado a TLWD?". Oliver habló de repente después de haber permanecido en silencio durante un tiempo. "Bueno, ¿Te parece que esta es tu casa?". "No..."

"¿Entonces por qué preguntas lo obvio?" El gato naranja lo miró aburrido. "Lávate la cara" afirmó. Oliver obedeció y se acercó al arroyo, pero en cuanto iba a coger agua y echársela a la cara su visión se encontró con un bonito, suave y delicado rostro que le devolvía la mirada.

Los ojos que le devolvían la mirada sobre el agua eran redondos, marrones y la mirada parecía suave y reconfortante. Oliver continuó mirándose a sí mismo a través de la superficie del agua, su nariz era pequeña y algo redonda, en general bastante suave; si se miraba lo suficientemente cerca se podía ver un leve rubor decorando su rostro juvenil, y el pelo era de un color marrón chocolate, algo ondulado. Se miró a sí mismo y pensó, wow realmente me parezco a esos protagonistas de las novelas que leo.

Al instante se sonrojó al pensar en ello. "¿Por qué tardas tanto? Date prisa, todavía tenemos que hacer otras cosas" dijo el gato, molesto. "Ok ok ya voy" Oliver se lavó rápidamente la cara y se puso de pie. "Vamos, debe haber un pueblo por aquí donde podamos pasar la noche. Ahora mismo tu única misión es sobrevivir la noche y con suerte encontrar al protagonista para no mueras el primer día que llegaste aquí"

Cierto, el protagonista. Oliver se había olvidado de él ya que estaba en plena crisis de transmigración. Khorne; ¿cómo estaba? Según lo que Oliver recordaba debió ser desterrado hace poco. Khorne debería estar vagando por una pequeña ciudad ahora mismo, al tener su sangre de dragón sellada no debería poder hacer mucho en este momento. Khorne había sido desterrado a los 10 años y el primer volumen comienza cuando Khorne tiene 17 años.

17? La misma edad que yo, pensó rápidamente Oliver. Entonces empezó a caminar para alcanzar al gato naranja. Realmente necesitan buscar un lugar para pasar la noche. La pareja de chico y gato caminó en la dirección que el gato señalaba.