Vol 2. 3. Feixingqi

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Apenas sus manos entraron en contacto con el árbol pudo sentir una gran corriente de fuerza entrando en sí. Oliver sabía que si iba a conquistar esto tendría que ser decisivo con su actitud; empezó a resistirse a la corriente y apoyar las manos con más fuerza. ¿Para qué era que necesitaba volverse más fuerte? Para poder proteger a la gente que le protegía a él también, pero más que nada para probarse a sí mismo que podía ser útil a los demás.

No importa si él salía herido...

Solo quiere ser útil a la gente que le importa...

Con eso siguió resistiéndose contra la fuerte corriente, sus brazos empezaron a doler, al principio era un poco molesto pero... parecía que mientras más fuerza usaba para resistirse, más fuerte se volvía la corriente. Estaba temblando todo su cuerpo, y gotas de sudor caían de su frente, pero aún así siguió peleando, esto solo sería el comienzo si pensaba utilizar esta energía para poder luchar contra enemigos.

Luego de que se sintiera completamente destrozado por la cantidad de fuerza que tuvo que hacer para resistirse, logró vencer a la corriente y ser él, él que estuviera empujándola. Oliver alejó las manos y se tambaleó por unos momentos, estaba demasiado cansado y todos los músculos le dolían.

"No creía que eso sería tan difícil" dijo sin aliento el transmigrador, "de hecho para los híbridos es aún más difícil, pero como eres de otro mundo solo te hicieron la prueba fácil" comentó el gato, lamiéndose la pata. "De ninguna manera eso era fácil" replicó Oliver, enojado; "cree lo que quieras, ahora, cambiando de tema, deberías saber que el encuentro entre Mathis y Khorne no ocurrió, por lo que la trama ha sido alterada enormemente."

"Sí, estoy al tanto de eso, pero ¿qué quieres que haga al respecto?" Sentado bajo el árbol estaba Oliver mirando al gato, "busca una manera en la que Khorne pueda llegar a Lao Qingren, ese es el punto más importante de este arco" informó el gato, que para la mala suerte del chico, tenía razón. "O si quieres, puedo decirte que tienes que hacer, claro, si me das algo a cambio" continuó el gato.

"¿Qué quieres?" Preguntó Oliver, cansado. "¡Más comida por supuesto!" Gritó el gato felizmente, "¿sólo comida" dijo el chico; "claro, a menos que quieras darme algo más" contestó el sistema animadamente, "no, no, así está bien" el peli café miró al piso con una cara de agotamiento. "Aproximadamente en un mes va a haber una feria en la capital, no puedo decir mucho al respecto pero el emperador va a atender, si logras que Khorne pueda hablar con él, tu problema se habrá resuelto" dijo el gato naranja.

"¿Qué clase de feria?" El chico miró más atentamente al felino después de haber escuchado esa información. "Ahhh, no puedo decir mucho ¿No ves que ya es momento de despertar?" Y al decir eso, Oliver abrió los ojos repentinamente y volvió a la habitación de hotel que había comprado Khorne. Un poco amargado por no tener las respuestas que quería del gato se estiró; Khorne que se encontraba en la mesa leyendo otro libro volteó a mirarle, "Parece que ha sido todo un éxito, te ves más fuerte que antes" dijo amablemente mientras cerraba el libro.

"Sí, de hecho creo qu-" pero antes de que Oliver pudiera terminar lo que quería decir, la tarjeta roja que se encontraba al lado del libro que Khorne leía se prendió en llamas por si sola.

Los dos chicos se quedaron mirando la carta, ¿qué clase de suerte es esta? Estupefactos, se levantaron y organizaron sus pertenencias rápidamente y salieron del hotel. A pesar de que el sol ya se había escondido y la luna estaba arriba de ellos, llegaron a la estación y vieron una fila de híbridos subiendo al Feixingqi con destino a la capital.

Aunque los Feixingqi eran rápidos, tardarían un poco en llegar a Jianwei, por lo que probablemente estarían allí de madrugada. Se acercaron a la taquilla, Khorne reconoció al mismo trabajador de antes "La carta se ha quemado... gracias..." el protagonista dijo con un tono que fácilmente haría que cualquiera se sonrojara; y justo eso iba a suceder, hasta que el trabajador vio al lado del peli blanco, allí estaba otro chico parado, más bajo que el peli blanco pero igualmente atractivo, ambos jóvenes estaban parados cerca del otro.

La vez que transmigré a una novela de sementales y la volví gay  Where stories live. Discover now