¿No me creerás? (Пσ sιяνιєη∂σ мαs) ʟɪʙʀᴏ 2

Capítulo 23

Lan Wangji vio a Wei Ying supuestamente reunir todo su coraje y responder a su pregunta con un asentimiento. Se imaginó que debía haber sido realmente muy difícil para el chico decir si todavía le gustaba o no le gustaba algo, incluso después de haberle asegurado que todo estaría bien. Lamentablemente, tan pronto como Wei Ying le mostró su opinión, una vez más se tensó y pareció muy asustado. El corazón de Lan Wangji cayó entonces.

Había esperado que cuando pudiera obtener una respuesta tan directa del chico, el otro entendería que quería ayudarlo a hacer lo que deseaba. Claramente se había adelantado a sí mismo. Por supuesto, debería haber esperado esto. Siempre fue así con Wei Ying: un paso adelante y dos o más pasos atrás. Realmente no debería ser tan sorprendente, después de todo, probablemente no había sabido nada más que esto en toda su vida. No sería tan fácil para él comenzar a confiar en alguien de la nada.

Como una forma de medir que no quería hacerle nada malo al niño, Lan Wangji le apretó la mano ligeramente. Había funcionado de maravilla en la mañana, por lo que esperaba que el contacto físico mágico resultara efectivo también en este caso. Un poco inseguro de sí mismo, agregó sin pensar: "Gracias por decírmelo".

Las palabras salieron de su boca antes de que él siquiera decidiera conscientemente decirlas y eso lo había sorprendido incluso a él. Sin embargo, parecía que era exactamente lo que Wei Ying necesitaba escuchar de él en este momento. Su expresión se iluminó y toda tensión desapareció de una fracción de segundo a la siguiente. Lan Wangji lo estaba mirando con atención para que no se perdiera que las lágrimas se habían acumulado en los ojos del niño y una pequeña sonrisa asomaba por sus labios.

Tuvo que felicitarse a sí mismo en silencio. No, eso no estaba bien, si se hubiera detenido a pensar en lo que debería decir, este momento se habría arruinado por su vacilación. Fue solo porque por una vez habló sin pensar, lo que había dicho venía directamente de su corazón. Y los efectos fueron simplemente fabulosos. Debería tratar de no pensar demasiado cuando habla con más frecuencia.

Apretó la mano del chico de nuevo y esperó un poco antes de que el otro se calmara. Sin embargo, no por mucho tiempo, tampoco quería que pensara demasiado en las cosas. Al final, tiró suavemente de su mano y Wei Ying se puso de pie obedientemente.

Lan Wangji de repente se encontró sin aliento. El niño se quedó allí, sin nerviosismo ni miedo en su misma postura. Había lágrimas corriendo por sus mejillas pero eso estaba bien, Lan Wangji estaba seguro en este mismo momento, que eran lágrimas felices o de alivio. Sin embargo, lo que más lo sorprendió fue el hecho de que Wei Ying no estaba de pie en la postura encorvada que solía asumir. El niño lo miraba directamente con tanta adoración en sus ojos, como si pensara que Lan Wangji acababa de ofrecerle sol y luna en un plato de oro.

Al ver esto, Lan Wangji se sintió un poco incómodo. No estaba acostumbrado a que alguien lo admirara así. Sintió el peso de la responsabilidad sobre sus hombros. No podía decepcionar a Wei Ying. Especialmente no cuando el chico estaba poniendo tanta fe en él y le estaba mostrando esta aparentemente infinita cantidad de confianza. Estaba mareado y tuvo que acordarse de tomar aire antes de que posiblemente se desmayara por la falta de oxígeno en sus pulmones.

No ayudó en absoluto que la sonrisa del chico fuera la más amplia que Lan Wangji había visto en su rostro en estos últimos días. Le estaba haciendo algo a su corazón y no podía nombrar ese sentimiento. Todavía no estaba cerca de esa sonrisa cegadora y deslumbrante que un niño que Wei Ying le había dado una vez, pero fue una mejora tan grande que quiso abrazar al niño y felicitarlo por ello.

Sin embargo, no estaba seguro de que fuera bien recibido. Si bien Wei Ying definitivamente se estaba abriendo con él y no retrocedía en cada uno de sus movimientos dirigidos hacia él, sostener su mano en apoyo silencioso y abrazarlo eran dos cosas completamente diferentes. Lan Wangji no estaba seguro de dónde había venido este deseo particular suyo, nunca había favorecido o buscado el contacto físico, especialmente uno de esta naturaleza íntima.

Sin embargo, negó con la cabeza internamente, ahora no era el momento de pensar en eso. En cambio, se centró en el chico que estaba frente a él con esa expresión increíblemente inocente y esperanzada. Sus ojos brillaban y Lan Wangji nunca quiso ver otra expresión en él que esta alegría sin filtrar.

Quería sostener la mano que tenía en la suya por un poco más de tiempo, pero sabía que era mejor no hacer que Wei Ying estuviera tan emocionado y no seguir adelante con sus acciones. Lo último que quería era que el chico dejara de confiar en él o se pusiera ansioso por su silencio.

"Elige y lee", soltó la mano de Wei Ying e hizo un gesto hacia la estantería más cercana.

Vio cómo la cara del niño se iluminaba literalmente cuando dijo que ahora podían leer. Parecía que solo había estado esperando anteriormente, pero ahora creía sincera y sinceramente en sus intenciones. Era bueno, Lan Wangji necesitaba solidificar esa frágil confianza, sería la base para la recuperación de Wei Ying.

El niño lo miró por un último segundo y luego se dio la vuelta para ir hacia la estantería que Lan Wangji acababa de indicar. Sus pasos vacilaron en medio de esa corta distancia. Aún dudaba. Fue adorable y desgarrador.

"Mn", le dio a Lan Wangji una señal de aprobación y observó con deleite cómo los pasos de Wei Ying se apresuraron hasta que estuvo de pie junto a la estantería.

Lan Wangji tuvo que sonreír para sí mismo cuando se imaginó cómo los ojos del niño ahora estaban escaneando los nombres de los libros mientras escogía uno en el que le gustaría sumergirse. Wei Ying estaba de espaldas a él, así que, por supuesto, no podía ver con sus propios ojos, pero podía adivinar e imaginar. También fue a elegir un libro para sí mismo, dejando que Wei Ying disfrutara pacíficamente de su libertad de elección.

Lan Wangji se sentó en uno de los sillones que su tío había encargado especialmente para la biblioteca. Eran grandes y cómodos, perfectos para leer. Había dos de ellos en esta biblioteca en particular y más en otras bibliotecas de Cloud Recesses. Quería mimar a Wei Ying aún más y disfrutar leyendo junto a él en estos muebles antiguos.

Mientras se imaginaba el asombro del niño mientras no solo leería sino que estaría sentado cómodamente sin preocuparse por el mundo, Wei Ying hizo una vez más algo que lo horrorizó. Como si las acciones del niño no fueran lo suficientemente desgarradoras, eligió un libro y procedió a sentarse directamente en el suelo. Ni siquiera miró a ninguno de los lugares de lectura instalados en toda la biblioteca, ni a los tapetes, alfombras o sillas, ni al par de sillones.

El corazón de Lan Wangji se detuvo una vez más y las lágrimas ardieron en sus ojos. Fue muy triste ver que Wei Ying claramente no pensó que se le permitiera sentarse en ninguno de esos y pensó que el único lugar que se le permitía usar era el piso duro. Él también había estado enfermo y todavía no se atrevía a usar ningún mueble de la habitación sin que se lo dijeran explícitamente.

"Wei Ying, ¿vienes a sentarte aquí conmigo?" Lan Wangji lo llamó gentilmente una vez que superó el impacto inicial de darse cuenta. Si Wei Ying necesitaba un permiso, con gusto lo daría tantas veces como fuera necesario hasta que se enterara de que no tenía que pedirlo en absoluto.

El niño casi se puso de pie de un salto y corrió hacia él. Si fuera en otras circunstancias, se vería adorable, como un cachorro feliz al que su dueño llama. Aunque aparentemente hizo feliz a Wei Ying y eso era todo lo que importaba. Lan Wangji le devolvió la sonrisa, satisfecho.

Sin embargo, no por mucho tiempo porque en lugar de usar el sillón, Wei Ying parecía estar a punto de sentarse en el suelo nuevamente, solo por los pies de Lan Wangji esta vez. Todavía no le parecía claro qué quería Lan Wangji que hiciera.

Como el chico todavía lo miraba, ahora con una expresión confusa en lugar de esa sonrisa tan brillante, Lan Wangji hizo un gesto hacia el otro sillón. Afortunadamente, esta vez, no asustó a Wei Ying, como parece. Le devolvió la sonrisa, lo que le alegró a Lan Wangji, pero no apreció la profunda reverencia que Wei Ying le hizo antes de sentarse donde le habían indicado y abrir el libro para leer.

Lan Wangji estaba desconcertado y solo podía observarlo en silencio. No estaba seguro de lo que significaba esa reverencia: o era Wei Ying mostrando gratitud o aceptando una orden. Tenía muchas ganas de saber, pero no se atrevió a distraer más al chico de la lectura. Probablemente no obtendría una respuesta de todos modos. Solo suspiró y abrió su libro también, continuó donde había terminado unos días antes mientras ocasionalmente revisaba al chico.