Capítulo ღ II

2.5K 301 66
                                    

Me giré disimuladamente hacia mi amigo y gesticulé—: Préstame tus audífonos.

De mala gana, mi amigo me los entregó y decidió tomar una siesta con los ojos abiertos pues ha ido perfeccionando esa técnica hasta que logró pasar la prueba de calidad ya que, el profesor nunca se percata de que uno de sus alumnos "más atentos" está durmiendo plácidamente.

Agradecí en silencio el hecho de que los audífonos sean bluetooth pues de esta manera es más difícil que el profesor se percate de que no estoy escuchando atentamente la clase de historia que es altamente estresante en lugar de ser interesante.

No pude evitar sentirme muy feliz al ver el magnífico hombre que está portando una camisa lo suficiente ajustada como para no dejar mucho a la imaginación y eso me vuelve loco por completo. Sé que no debería de estar viendo esto en clases, pero es inevitable no caer ante la tentación.

—Hola, ¿cómo se encuentran hoy? — el hombre híper atractivo preguntó con un tono de voz sumamente varonil que me erizó la piel por completo. Después de leer algunos comentarios, prosiguió—: Yo estoy muy bien. Realmente me siento muy feliz por tenerlos conmigo a pesar de estar distanciados. ¿Qué les gustaría hacer hoy?

No tardé ni un solo segundo en escribir en el chat: «¡Muéstranos tus brazos!».

¿Ya quedó en claro que estoy enamorado de sus fuertes, varoniles y musculosos brazos que desearía tener a mi alrededor a tiempo completo? Espero que sí.

El hombre leyó los comentarios y deseé ver su rostro, sin embargo, eso es imposible pues él nos dejó muy en claro desde la primera trasmisión que, nunca mostraría su rostro por cuestiones de privacidad... ¡Por Dios! Ya le conocemos todo el cuerpo, ¿qué más da si nos muestra su rostro que, posiblemente ha sido tallado por los mismos dioses de la perfección?

Decidí leer algunos de los comentarios en el chat y no pude evitar sentirme demasiado identificado con uno que otro mensaje.

Daría todo lo que me fuera posible para encontrarme frente a frente con ese hombre que me hace temblar sin siquiera haberlo conocido en persona. Debo admitir que, no cualquiera puede trasmitir tantas emociones, sentimientos y un alto nivel de excitación con tanta facilidad como lo hace Chris —él nos dijo que podíamos llamarlo así—, el hombre más perfecto de todo el mundo.

No pude evitar sonreír como un completo estúpido tras tragar en seco al ver como Chris mostraba sus bien definidos brazos que están adornados por atractivas venas que lo hacen ver mucho más apuesto...

Pagaré hasta el último centavo con tal de ver por unos minutos a Chris sin importar nada más que mi bienestar mental.

𝙳𝚊𝚍𝚍𝚢'𝚜 𝚁𝚘𝚘𝚖 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora