Capítulo ღ XVI

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—Profesor Bang, ¿podría iniciar con eso de los roles?

—¿Por qué tanta prisa? — preguntó Bang con curiosidad.

—Deseo probarlo, profesor Bang— dije sin un gramo de vergüenza y el pelinegro no pudo evitar tragar en seco.

Sin intentar besarle o acariciarlo, me deslicé al piso, arrodillándome entre las bien trabajadas piernas de Bang y le quité la toalla. Liberé su miembro ya erecto y no dudé en chupar la punta para luego lamer alrededor; deslicé una de mis manos libres hacia sus pelotas y abrí mi boca por completo para tomarlo entero. 

En estos momentos necesito dejar salir a flote mis deseos que han sido bien ocultos en un intento de no ser burlado o señalado por las personas que me rodean; claramente, me siento demasiado atraído por el hombre que tengo frente a mí desde que lo vi por primera vez en aquel vídeo que me hizo darme cuenta que, me gustan más los hombres.

Durante tantas trasmisiones me había masturbado mientras escuchaba las palabras calientes que salían de la boca del pelinegro y no puedo negarlo. Ahora que tengo su miembro dentro de mi boca puedo asegurar que, no habrá otro hombre que pueda ocupar su lugar y debo aprovechar estos momentos, de lo contrario, me arrepentiré de por vida cuando esto finalice.

Soy un completo inexperto en estas cosas, nunca he tenido sexo, sin embargo, me he visto unos cuantos videos porno antes de venir aquí porque no quiero parecer un completo estúpido frente a ese grandioso hombre.

—Oh, Dios— gimió Christopher. Recostó su cabeza y cerró sus ojos dejando que sus dedos vagaran por mi cabello. —Sí... Oh, sí— gimió nuevamente y entendí que no estaba yendo por un mal camino.

Retiré mi boca lentamente hasta tener solo la punta de su miembro dentro y después lo tomé por completo.

Chris tiró bruscamente de mi cabello y me alejó de su dulce y delicioso miembro. Deslizó sus manos en mis brazos y me atrajo encima de él. Inesperadamente, me besó en los labios y me sentí demasiado feliz; abrí mi boca con obediencia y el pelinegro no dudó en tomar el control por completo del beso que está cubierto en deseo y necesidad.

Chris movió una mano entre nosotros y la deslizó hasta abrir la cremallera de mi pantalón y después buscó mi erección.

—¿Sabes qué quiero ahora mismo? — negué con la cabeza a modo de respuesta por lo que Chris dijo—: Te quiero sufriendo y rogando por mi toque.

𝙳𝚊𝚍𝚍𝚢'𝚜 𝚁𝚘𝚘𝚖 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘Where stories live. Discover now