𝙳𝚊𝚍𝚍𝚢'𝚜 𝚁𝚘𝚘𝚖 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘

Capítulo ღ XXIII

Había mencionado que detesto las fiestas, sin embargo, necesito distraerme en estos momentos ya que, no puedo dejar de pensar en el profesor Bang y sus brazos tan perfectos al igual que su sonrisa y labios; todo en ese hombre es extremadamente maravilloso y no tengo duda sobre ello.

—Amigo, te traje una bebida que he hecho— dijo Binnie tan pronto extendió un vaso rojo con un líquido de colores que me pareció ligeramente extraño, sin dudarlo, tomé el vaso y lo llevé a mis labios para ingerir de un solo trago la bebida que me provocó un ardor en mi garganta. —Mierda, Minho— murmuró Changbin —No debiste de haberlo tomado así.

—No pasa nada... — sonreí. O al menos, eso intenté hacer pues todo mi cuerpo pareciera que ha decidido desconectarse de mi cerebro por unos instantes.

—Creo que tu amigo necesitará ayuda para volver a casa— dijo un chico de cabello rosa mientras evitaba soltar una carcajada.

—Es correcto— concordó Seo.

—Yo estoy muy bien— les aseguré y agregué—: Iré a bailar. Ahora vuelvo.

Caminé hasta el centro de la enorme habitación y me dejé llevar por la música que me parece ideal en estos momentos.

Necesito liberarme del estrés que yo mismo me he provocado a causa de que no entiendo a la perfección el hecho de que Christopher Bang y yo, solamente pasaremos buenos momentos y después tomaremos nuestros respectivos caminos. Obviamente es una completa tontería pensar que, tendremos una relación linda y llena de amor.

De pronto, sentí que alguien se había posado detrás de mí, sin embargo, no le de importancia hasta que esa persona posicionó sus manos sobre mi cadera y ejerció un poco de fuerza para atraerme a su cuerpo que parece debilucho a comparación del profesor Bang.

—Eres demasiado hermoso. ¿Te gustaría ir a otro lugar? — me preguntó un chico con tono sensual y lo único que pudo generar en mi fue asco.

He comprobado que, nadie más podrá hacerme temblar por completo con tan solo mirarme a menos que sea el profesor Bang.

Ni siquiera tuve oportunidad de hablar pues el chico me tomó del brazo y prácticamente me arrastró hacia el exterior de la mansión. Lamentablemente, no tengo el control de mi cuerpo en estos momentos pues la bebida que he ingerido en un abrir y cerrar de ojos parece que, logró noquearme por completo y eso es muy peligroso.

El chico acercó su rostro a mi cuello y comenzó a repartir ásperos besos que me hicieron sentir más asqueado; intenté alejarme, pero me fue imposible pues él tiene mucha más fuerza que yo.