25. El Final Del Principio

5.2K 379 67
                                    

" PRESIENTO QUE ERES TÚ AQUELLO QUE LLAMAN FELICIDAD"

__________________

Sábado 15 de Agosto de 2020

" Querido diario. Lo he intentado, te juro que lo he intentado. Pero ya no puedo más. No puedo luchar yo sola contra todos. Porque a Pedri hace tiempo que lo perdí. Él está centrado en su carrera y no se lo reprocho porque aunque quisiera, sus padres lo manejan a su antojo. Anoche llamé al abuelo Pedro. Un día me dijo que si necesitaba algo que recurriera a él y es lo que he hecho. Necesito irme de aquí. Necesito vivir o me voy a ahogar. Me ha propuesto irme a París. Allí tiene un piso enfrente de la Torre Eiffel del que su hijo y su nuera no tienen ni idea de su existencia. Me ha ofrecido irme a París el tiempo que necesite. Incluso me ha sugerido que debería matricularme en la Escuela de Bellas Artes de París, algo que si ha despertado mi curiosidad. 

Así que si, después de mucho pensarlo, voy a aceptar su oferta y me voy a París. Por mi salud mental necesito alejarme de aquí, de un sitio donde no me quieren ni donde yo quiero estar. El abuelo Pedro me ha dicho que no me preocupe, que él se encarga de todo. Que prepare mi maleta y que mañana por la mañana temprano viene a buscarme. 

Así que sí, me voy. Y se enteraran todos que me he ído cuando ya esté en París. No se merece ninguno que me despida de ellos. De ninguno"
__________________________

En la actualidad....

Los dedos de Pedri acariciaban la espalda desnuda de su mujer. Acababan de hacer el amor mientras la tarde caía en Chipre. Después de una mañana de intenso turismo ahora descansaban en su habitación del hotel listos para salir más tarde y darse una buena cena. Naira intentaba aguantarse las cosquillas mientras Pedri acompañaba sus caricias con tiernos besos en la espalda.

- Un día me gustaría que fuéramos a París Pedri. Me encantaría enseñarte los lugares que más me gustan de allí

- Cuando tú quieras. Aunque te advierto, yo de francés, ni papa

Naira giró su cabeza para mirarlo y regalarle una de esas sonrisas que a él tanto le gustaban.

- Yo tampoco es que supiera mucho cuando llegué. Pero o espabilaba o como el primer día que me comí un bocadillo de anchoas por no saber pronunciar

Pedri no pudo evitarlo y emitió una carcajada mientras sus dedos se perdían en la suave curva de su espalda.

- ¿Te costó mucho estar sola allí?

Naira cogió aire con fuerza y se dió la vuelta completamente en la cama. Sus pechos desnudos eran toda una invitación para los dedos de Pedri. Los recorrió lentamente haciendo que la piel se le erizara a la pelirroja.

- Al principio si. Lloré mucho de verme sola. Sobre todo por la manera en la que estaba allí. Pero cuando la primera noche no tuve pesadillas, entonces comprendí que realmente algo estaba cambiando. Me adapté, me apunté a una academia de francés para no comer más anchoas y disfrute de lo que realmente me gustaba, pintar

Pedri tragó saliva con fuerza, pues aún se sentía culpable por todo lo que Naira tuvo que sacrificar por su culpa. Mientras ella se refugiaba en París, él disfrutaba de su condición de chico soltero.

- ¿ Hubo algún chico? -le preguntó él con el corazón en vilo- sé que no tengo derecho a preguntártelo, sobre todo cuando yo no es que sea el más adecuado para dar ejemplo

- Hubo algunos besos, pero nada más Pedri. Te lo dije una vez, no podía siquiera pensar en otra persona cuando aún pensaba en ti preguntándome porque lo nuestro no funcionaba. ¿Sabes? durante un tiempo tenía la fantasía de que tú aparecías en París y me decías que volviera, que querías estar conmigo...pero sólo era eso, una fantasía

ᴛᴇ ᴠᴏʟᴠᴇʀÍᴀ ᴀ ᴇʟᴇɢɪʀWhere stories live. Discover now