::Sesenta y nueve (rumores -18)::

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Atravesando el portal, el minino se detuvo en seco viendo aquella escena, de TaeHyung usando un vestido, acorralado a un sonrojado JungKook contra la pared. Pero a diferencia de él, ese otro JungKook tenía cola y orejas de lobo, cola que se movía rápidamente de lado a lado.

TaeHyung estuvo a punto de besarlo, pero se detuvieron viendo el portal y al minino observando en silencio con el Gatito aún en su hombro.

—¡Otro JungKook! —Dijo el chico con vestido emocionado al alejarse de su lobito —¿Autora, me has mirado a los ojos?

—¿Qué está pasando? —Pregunta el lobito abriendo los ojos al notar que TaeHyung no lo beso. Topándose con aquel hombre igual a él, con cola y orejas de gato.

—Mira, al fin aparecemos de nuevo, ya no estamos olvidados —Dijo el peligris con vestido viendo al lobito.

—Pero esta no es nuestra historia.

—Que importa, aún nos recuerda ¡Ahora dame un hijo! —Se quejó el peligris con vestido el cielo. Pero no había respuesta —¡Oye! Sé que estás ahí, no me ignores —Se quejó con enfado.

—¿A quién le habla? —Cuestiona el minino a su otro yo, pensando que ese TaeHyung está loco dedicando insultos al cielo.

—A la autora. Nunca termino nuestra historia —Dijo con las orejitas caídas.

—¿Quién es autora?

—Quién nos creó ¿Tú por qué te pareces a mí?

—Soy tú, pero mejor —Dijo viendo el bosque a su alrededor, dándole una crisis existencial al lobito ¿Hay otros él por ahí? ¿Mejores que él? —Creo que TaeHyung se equivocó al hacer el portal —Murmuró.

—Es un caso perdido —Suspiro el chico con vestido volviendo a ver a ambos JungKooks —Tú —Vio al minino —¿Nos vimos antes no?

—Tal vez, no recuerdo —Negó el minino.

—Hace unos años, traté de saltar por la ventana, tú eras un gato —Dijo y el rostro de JungKook se distorsionaea a una mueca .

—Lo recuerdo ¿Por qué hiciste eso? —Se quejó.

—Creí que eras YoonGi, pense que me había raptado para cobrar él dinero que le debía —Negó —Está algo loco —Murmuro, el minino solo le observó en silencio, creyendo que el loco era otro.

—¿Pero qué…? —TaeHyung se detuviera al entrar notando que hizo mal el hechizo.

—¿Qué está pasando? —Pregunta el castaño con la máscara viéndose a sí mismo con vestido, mientras el pequeño brujo abría su grimorio buscando el hechizo.

—Oh, me equivoqué en un símbolo —Río el omega antes de volver a hacer el hechizo —Vamos.

—Dile que me dé mis hijos —Dijo el chico con vestido poniendo su mano sobre el otro hombro del minino —A ti aún no te olvida esa perra. No me importa si es un extra, pero pídele que JungKook al fin me embarace.

—¡TaeHyung! —Se quejó el lobito con la cara roja.

El minino únicamente hizo una mueca marchándose tras de su TaeHyung —¿De quién hablaban? —Pregunta el pequeño brujo y JungKook se encogiera de hombros.

—No sé, creo que está loco —Dijo alzando su mano para acariciar al gatito.

Viendo la entrada de aquella enorme casa, el peligris suspiro, hace mucho no estaba por ahí, deteniéndose a si otro yo de la camisa cuando quiso alejarse —¿Y ahora que hacemos? —Pregunta el peligris viendo al castaño.

—No sé tal vez ocultar sus orejas y cola —Dijo el castaño con obviedad.

—Cierto, aquí todos son humanos normales —Dijo el peligris soltándolo y hacer un hechizo para ocultarlas, las de JungKook únicamente se desvanecieron en humo.

—Apesta a perro —Se quejó JungKook tapándose la nariz.

—¿TaeHyung…? —Dijo una voz tras de ellos. Haciendo que voltearan, encontrando a aquel chico, cargado unas bolsas con comida para YeonTan, quien era llevado por una correa. El pequeño se emocionó al ver a su amo, así que corrió hacia él. Pero se detuvo viendo a JungKook a los ojos.

El pelinegro abrió los ojos de, con ese rojo sangré brillando de odio, rápidamente el omega le quito la máscara al castaño y ponérsela al minino.

—¡No! —Se quejó el castaño tapándose la cara.

—JungKook, tranquilo —Pidió el omega tomando al minino de las manos, alejándolo de YeonTan. La respiración de JungKook es errática y su cuerpo estaba muy tenso, no podía evitar recordar su trauma al ver un perro demonio.

El joven exorcista solo arqueo una ceja viendo la escena, el castaño estaba de cuclillas en el suelo tapando su cara, YeonTan observaba al castaño y al minino con indecisión, no sabía si saludar primero a su amo o a su rey. El peligris, por otra parte, abrazaba al minino tratando calmarlo.

Volviendo a ver al castaño, el alfa se acercó al castaño —TaeHyung… —Le llamo agachándose a su lado.

—Hola… —Respondió en voz baja.

—¿Por qué tapas tu rostro?

—No traigo mis lentes —Se quejó estos haciendo que no viera los demonios. Escuchando aquel pequeño ladrido, destapó su cara y ver a YeonTan.

El alfa solo observó ese familiar rostro, con ojos brillosos, sonriendo al ver a su amigo.

—Bebé ven aquí —Extendió los brazos y el pequeño y preludio perro corriera hacia él, siendo abrazado por el omega —¿Té portante bien mientras papá no estaba? —Pregunta y El pequeño ladrara lamiéndole la cara, meneando su cola feliz.

—Es un chico muy obediente —Dijo el alfa acariciándole la cabeza a YeonTan.

Alzando la mirada, el castaño hizo contacto visual con el pelinegro, esa cálida y bonita sonrisa aún podía ser dedicada a él. El aroma de JungKook, esos brillantes y expresivos ojos siguen siendo iguales, le acelero el corazón, pero eso únicamente le dio una sensación de tristeza más que alegría.

—Gracias por cuidar de él —El castaño se levantó alejándose de del alfa —E-ellos querían hablar contigo —Los señalo manteniendo su distancia. Su corazón aun guarda pequeñas brazas de sentimientos que nunca pudo apagar, así que no quería que estos lo incendiaran por dentro.

Notando como el omega se alejaba de él, JungKook se levantó. Si tiéndase mal por el rechazo —Está bien —Dijo acomodando las bolsas antes de acercarse a ellos.

Bajando la mirada, el omega sintió su corazón estrujado en su pecho, sintiéndose triste, pero la lamida de YeonTan en su mejilla lo hizo sonreír.

—Gracias —Sonrió abrazándolo con un poco más de fuerza mientras sonreía, YeonTan olía un poco a JungKook.

::Gatito mimado:♱:KookV::Donde viven las historias. Descúbrelo ahora