𓏲 Capítulo 30

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Mina suspiró cansada y se dejó caer despreocupada sobre su cama con la pijama puesta luego de su relajante baño, había sido un día muy movido y ocupado junto a Chaeyoung, agregando la fiesta sorpresa que sus amigas y hermana organizaron para ella. A pesar de todo, en definitiva, ese había sido su mejor cumpleaños, y por eso, merecía su debido descanso.

— Minari~— Chaeyoung subió a la cama y se puso de rodillas frente a la pelinegra, descansando sobre sus pantorrillas con una pequeña sonrisa — ¿Estás muy cansada ya?

— Un poco, ¿por? — sonrió ladina, pasando sus brazos tras su cabeza, poniéndose cómoda.

Chaeyoung gateó hacia ella con una sonrisa pícara en sus labios, sentándose a horcajadas mientras reía con diversión. Mina puso sus manos sobre la cintura de la rubia, sintiéndose ansiosa por lo siguiente.

— Voy a darte otro regalo de cumpleaños, Minari — dijo Chaeyoung con cierta picardía, moviendo sus manos sobre el pecho de Mina de manera coqueta.

— ¿Qué es? — se hizo la desentendida, mordiendo su labio inferior, sintiéndose repentinamente acalorada.

— Yo, obviamente — rió, pasando la camisa de dormir sobre su cabeza, quedando con el torso descubierto, expuesta ante la fría habitación.

Mina relamió sus labios ante la vista, otra vez fascinada por la chica frente a ella. Cada vez que estaba de esa forma con Chaeyoung, se sentía muy nerviosa hasta que poco a poco dejaba ese sentimiento gracias a las que ella le daba, gracias a la seguridad y confianza que le transmitía, pero ahora era diferente; estaba muy nerviosa, sí, pero porque tenía algo más en mente, algo que estuvo pensando últimamente y que solo podía hacer con Chaeyoung.

— Chaeng, ¿eres mi regalo de cumpleaños, cierto? — preguntó, dejando escapar un suspiro ante los movimientos de Chaeyoung contra su centro, apartando la vista de su cuerpo para enfocarla en los ojos de su linda novia.

— Sip, ¿no te gusta? — hizo un puchero, ahora moviéndose en círculos en el mismo lugar con el afán de provocarla.

— Mmm, ¿podríamos hacer algo diferente? — detuvo los movimientos de la menor con sus manos presionando su cintura, obteniendo una expresión confusa de su parte.

— Claro, dime qué quieres — asintió, frunciendo un poco el ceño.

Bien, si antes estaba nerviosa, ahora no podía ni siquiera formular bien las palabras. Chaeyoung no iba a juzgarla, no tenía dudas, sin embargo, temía un poco ante su reacción, ella realmente quería intentarlo, y no quería lucir desilusionada en caso de que Chae se negara, tampoco quería que pareciera que estuviera forzándola.

— Yo, uhm, puedo... ¿Puedo estar abajo ahora? — respondió unos minutos después, su corazón empezó a latir con fuerza contra su pecho, jugueteando con las manos de Chaeyoung entre las suyas como clara señal de nerviosismo.

— ¿Te refieres a...?

— Si — asintió, ambas totalmente en sintonía — Exactamente a eso me refiero.

Chaeyoung se mantuvo quieta por un rato, procesando lo que estaba sucediendo en ese preciso momento que tomó un rumbo diferente. Recordaba la conversación que tuvieron cuando recién empezaban a salir, Mina le había dicho abiertamente que le gustaría intentar ser la que recibe alguna vez, pero creyó que lo había olvidado ya que no volvieron a hablar al respecto, no habían indicios, tampoco indirectas. Tenían sexo cada vez que tenían oportunidad, estaban acostumbradas a la misma dinámica en la que Mina tomaba su rol de activa, y ella la de pasiva, sin ninguna queja, porque estaba acostumbrada a eso, así se sentía cómoda; por lo que esa petición la tomó por sorpresa.

❝ Forbidden ❞ || MichaengWhere stories live. Discover now