Samara (+21)

16.Valentía

Alessandro Moretti.

Salí de la habitación hirviendo en rabia,como podía pensar ella que la iba a matar.

Nunca le pondría una mano encima,que tanto habrá pasado, ahora lamentaba todo lo que se decían en las calles de mi.

Me costaría mucho llegar a su corazón,era demasiado hermética y fría.

Apenas mostraba sus emociones,pero si era muy curiosa,eso me empezaba a gustar de ella.

Pensaba mucho las cosas y hacia preguntas sin filtro.

Y era demasiado sensual,como movía su boca al hablar me había desconcentrado en varios momentos.

Era pura belleza,me encantaba ,sólo pensaba tenerla en mis brazos.

Había notado que se alejaba mucho del contacto, necesitaba descubrir todos sus secretos.

Ahora mismo odiaba no tener el control de ella, pero lo poco que hemos hablado me ha servido de calmante,he estado tranquilo y sereno a su lado.

Quién lo diría que una personita tan pequeña y valiente me calmara lo suficiente para no pensar en nada más que en ella.

Aunque eso no es que fuera nada difícil,ella ocupa parte de mis pensamientos desde que la vi por primera vez.

Pero aunque ella tenía ventaja sobre mi,no podía dejar pensar que en cualquier momento podía escapar.

Pero también esperaba que aceptara mi propuesta.

En tres meses sabía que podía llegar a ella,si la tenía a mi lado ,en mi casa , podía adentrarme a su frío corazón.

Por ella haría lo que fuera,y según ella me había confirmado,sin quererlo que estaba escapando de algo,que todavía no sabía.

Pero lo sabría tarde o temprano.

Yo le ayudaría a que dejara de huir,ya que a mi lado nadie la tocaría, destrozaría a cualquiera que le pusiera la mano encima,como ya había echo con los dos que la dejaron en ese estado.

Me había asustado demasiado cuando sus pulmones les costaba respirar,menos mal que estaba Antoni,y le dio ese aparato.

Debería saber cada cosa aunque sea mínima que le afectará,para poder cuidarla bien.

Me acerqué a Marcus,que estaba con un escudo delante de la puerta de mi muñeca.

Le había dejado apenas hace unas dos horas sola para que le hicieran las pruebas y ya la echaba de menos.

-¿alguna novedad?-pregunte mientras cogía mi móvil y empezaba a escribir lo que necesitaba que trajeran para que ella se sintiera cómoda en su estancia en el hospital.

-Le han echo algunas pruebas,ha entrado el señor Antoni,y varias enfermeras todas revisadas por mi, y le han acompañado dos de los chicos a las pruebas -dice seriamente como siempre -yo he echo un nuevo protocolo de seguridad para ella en cuando salga del hospital se activará-me informa como siempre.

El siempre planeaba toda la seguridad,yo apenas había pensado que al estar a mi lado debería tener tanta seguridad como la mía o más,porque no dejaría que los rusos se acercarán a ella.

Sé que es mucho riesgo que ella esté a mi lado en estos momentos,pero no puedo dejarla ahora que la había encontrado,y todavía no ha rechazado mi propuesta.

¡Había esperanza de que se quedará a mi lado!

Esperaba que se lo pensara,sino tendría que buscar otro plan,pero lo que tenía claro que ella no se iría de mi lado.