Corte 7: Perdidos en el bosque

102 19 15
                                    

Corte 7: Perdidos en el bosque



—¿Seguro que no nos siguen?

—No, ya no, los hemos despistado.

—¿Estás seguro?

—Sí, totalmente seguro. Cálmate, vamos... tranquila.

Tranquila.

Me repetí tres veces la palabra antes de respirar hondo y dejarme caer al suelo. Estaba agotada, destrozada después de pasar toda la noche en el bosque, huyendo de nuestros perseguidores. Me dolían los pulmones al respirar y las rodillas al caminar. Apenas sentía las piernas y tenía las palmas de las manos ensangrentadas de todas las veces que me había caído. Porque sí, subir había sido duro, pero bajar ladera abajo sin resbalar en las placas de hielo había sido imposible.

Pero lo habíamos conseguido. Nuestros perseguidores habían estado a punto de encontrarnos en varias ocasiones, pero tras casi dos horas sin saber de ellos podíamos confirmar que, al menos por el momento, habíamos escapado.

La gran duda era, ¿hasta cuándo?

Thomas abrió la mochila que había logrado rescatar del campamento antes de que nos viésemos obligados a huir y me tendió la botella de agua. Estaba casi vacía, pero tenía la garganta seca. Desenroscó el tapón y bebí con ansia.

—Acábatela si quieres, yo estoy bien.

—¿Seguro?

El policía asintió y yo fingí que le creía. Tal era la sed que sentía que vacié la botella en apenas un par de segundos. Después me arrepentí. Por muy mal que se hubiese portado conmigo la noche anterior, cuando se volvió loco, seguía libre gracias a él.

Le devolví la botella y tomé su mano cuando me la tendió para ayudarme a levantarme. Tirarme al suelo en mitad de la nada no era la mejor forma de hacer frente a nuestra crisis. Lamentablemente, tampoco sabía qué podíamos hacer. Teniendo en cuenta que había sido el propio Gadot quien había secuestrado a mi hermano y Tyara, volver a Lycaenum quedaba descartado.

—Busquemos algún lugar donde descansar un poco más resguardados —me propuso—. Cuando recuperemos fuerzas, seguiremos.

—¿Cuál es el plan?

—¿Sinceramente? —Negó con la cabeza—. No lo tengo muy claro. Se han llevado a Lobo y a Tyara al pueblo, estoy casi convencido. Ahora solo queda saber cuándo van a matarlos; tenemos que encontrar la forma de evitarlo.

—¿De veras crees que los van a matar?

Thomas frunció el ceño.

—Después de lo que pasó y lo que vieron... —Miró a su alrededor—. Me juego lo que quieras a que harán que "desaparezcan en el bosque".

Incluso teniendo las mismas sospechas que él, sentí miedo. No era estúpida, había visto cómo pateaban a Lucian. Habían sido crueles. Muy crueles. De hecho, habían golpeado a ambos, pero se habían cebado en especial con él. Lobo había intentado resistirse y las consecuencias habían sido horribles. Sin embargo, incluso después de ver aquella escena, había querido pensar que aún había un poco de esperanza.

Que, en el fondo, podríamos dar con una solución a todo lo que estaba pasando...

Pero no era tan fácil. Podía intentar engañarme, pero teniendo en cuenta que estaba perdida en mitad de un bosque, después de haber estado corriendo durante horas, escapando de unos perseguidores anónimos cuyo objetivo era reunirnos con Tyara y Lucian, no tenía sentido. Iban a matarnos, sin más. Nos encontrarían y nos matarían, y a no ser que quisiéramos aceptar aquella mierda de destino, tendríamos que tomar medidas.

Por suerte, en la mochila de Thomas había algo más que agua.

—Tenemos que encontrarlos: ¡no voy a dejar que los maten! —exclamé con vehemencia.

—Desde luego, no lo vamos a permitir, pero debemos actuar con cautela. Primero hay que localizarlos, y una vez sepamos dónde están, decidiremos qué hacer. Pero vamos, está claro que tenemos que volver a Lycaenum. —Hizo un alto—. Arg, Lycaenum, como odio ese maldito pueblo... empieza a estar al nivel de Oniria.

—¿Oniria?

—Mejor no preguntes... cabeza fría, ¿vale? Saldremos de esta, te lo prometo.




Ops! Esta imagem não segue nossas diretrizes de conteúdo. Para continuar a publicação, tente removê-la ou carregar outra.
LoboOnde histórias criam vida. Descubra agora