Epílogo

138 14 9
                                    

POV Jazmín

—Esto es serio, devuélvelo o me enojaré —advertí.

—No entiendo porqué tanto lío con un cuaderno —confesó Luck observando el objeto en sus manos.

—¡Devuélvelo! —exclamé molesta.

—Veo que es importante para ti. Te voy a decir como me solías decir a mí, te lo devolveré si me das algo a cambio.

Tras escucharlo respiré hondo y crucé sus brazos mirándolo mal.

—No me mires así Min, ahora sabes como me sentí yo cuando te llevaste mis espejuelos.

—Te haré un negocio —declaré pensativa—. Tú me das el cuaderno y yo doy un vaso lleno de jugo para ti solito.

—¿De qué sabor?  —cuestionó Luck.

—Tu preferido.

—¿Cuándo me lo darías? —preguntó él.

—Suelta el cuaderno y ve al refrigerador, encontrarás el jugo esperándote.

Luck me dio el cuaderno y corrió a cocina con una sonrisa en su rostro. Yo reí y guardé el cuaderno en una gabeta con llave para que él no lo volviera a coger.

Tras unos segundos sentí algo muy frío tocar mi mejilla e instintivamente di un brinquito y me separé de lo que fuera. Ahí vi a Luck aguantando la risa.

—¿Qué me hiciste en la mejilla? —pregunté con cara de pocos amigos.

—Te dejé un beso en ella —respondió Luck—. Es que comí varios cubitos de hielo. Tu reacción fue graciosa.

—Queda confirmado que tú no eres una persona normal.

—A veces no —aseguró él entre risas.

—Detente —pedí neutra.

—Vale, perdóname. No te haré más bromas —aseguró Luck y me empezó a hacer cosquillas en la barriga—.  ¿Qué tenía dentro el cuaderno? Dímelo o sigo con las cosquillas.

—Dibujos —respondí intentando no reír.

—¿Por qué no me dejaste verlos?

—Son diseños —contesté e empecé a reír por las cosquillas.

—¿Diseños de qué? —indagó Luck deteniendo su ataque de cosquillas.

—Vestidos —indiqué calmando mi risa.

—Quiero verlos.

—No. Me da vergüenza —dije apenada—. ¿Y si mejor te olvidas de mi libreta?

—Si no me enseñas la libreta pensaré que no me valoras y si creo que no me valoras podría romper nuestra relación.

—Tú sabes que yo te quiero —aseguré rodeando con mis brazos su cuello.

—Sé lo que estás planeando y no te dejaré besarme a menos que me muestres tus dibujos.

—Tú ganas —acepté de mala gana—. Si que aprendiste a negociar.

—Lo sé —afirmó orgulloso.

Revolee mis ojos viéndolo mal y fui en busca de mi libreta. Con dudas le di la libreta a mi novio y él empezó a pasar las páginas observando los diseños.

—Son diseños muy buenos Min. ¿Piensas dedicarte a esto?

—Sí —respondí segura.

—Tienes talento —afirmó Luck.

—Tú también tienes talento.

—Claro —ironizó—. Solo tengo talento para ser buena persona.

—Incorrecto. Eres bueno con la mecánica. Pero lo más importante es que tienes el talento de hacerme feliz.

Luck me observó sorprendido y dijo:

—En ese caso usaré mi talento todo el tiempo que duré nuestra relación y trataré de hacerte feliz todos los días.

—¿Y si empiezas por invitarme a una comida? —cuestione sonriendo.

Él asintió y tomó la mano. Ninguno de los dos sabíamos cuanto duraría nuestra relación, pero si sabíamos que ambos daríamos lo mejor, y, con eso bastaba.

¡Devuélvelo!Where stories live. Discover now