—Cariño, cariñito, amor mío.
—¿Um? —murmure tratando de centrarme en terminar de hacer mi tarea.
—Hasme caso Luck —reprochó mi novia.
—Jazmín, trato de hacer la tarea antes de que empiecen las clases —indiqué cansado—. Recuerda que por tu culpa no tuve tiempo de hacer la tarea, ni dormí casi nada ayer.
—Pero te la pasaste bien, reconocelo
—Eso sí, siempre me gusta hablar contigo sin importar la hora. Me divertí oyendo tus historias, aunque fueran por casi tres horas —afirmé sincero y cerré la libreta—. Tarea terminada, ahora la siguiente.
—Copia la mía —sugirió ella.
—Gracias Jazmín, pero prefiero hacerla yo mismo.
—¿Por qué últimamente me dices Jazmín? —cuestionó cruzando sus brazos—. Deberías decirme cariño o amor.
—¿Por eso me andas molestando desde que llegué? —indagué y cuando la vi asentir le sonreí—. Verás amor, lo pensé y me gusta llamarte por tu nombre porque es hermoso y te pega totalmente. Además, alguien te lo puso porque te quería, no para que llegará yo y te dijera un seudónimo.
—¿En serio es por eso? —preguntó conmovida y me abrazo—. Jazmín es el nombre que me puso mi madre adoptiva. Mi nombre original era Rubí, pero para ti siempre puedo ser tu Jaz o Min. Mi madre no se molestará.
—De acuerdo, cariño.
—Es un deleite para mis oídos escucharte llamarme así —dijo ella con alegría y dejo de abrazarme—. Gracias por oírme.
Negué sonriendo y le besé la mejilla.
—Gracias por ser sincera, Jazmín.
YOU ARE READING
¡Devuélvelo!
Short StoryÉl dejo descuidado unos minutos un objeto muy significativo en su vida: Sus anteojos. Ella los vio y los cogió. Vez tras vez algo le pidió, pero, ¿qué quería en realidad? ¿Por qué fingió no saber de aritmética? Saga "chicasflores" #3
