ONE SHOTS (Libro 1) -- CHICAS - MARVEL & DC & ARROWVERSE

59.2 Samantha Arias

Rayis Pov

Me encontraba al frente de su puerta muriéndome de nervios. Mis manos sudaban y temblaban con el ramo que le había traído. Como pude ver, ayer le encantó el ramo de rosas y lirios que le había llevado así que le traje el mismo pero con arreglos más bonitos. Miré mi traje por décima vez para verificar que todo estuviera bien hasta que recibí un mensaje en mi celular el cual saqué y casi me ahogo con mi propia saliva.

"¿Piensas tocar la puerta o quieres que te abra así nomás" leí su mensaje y sentí que casi me desmayo de la vergüenza. Tomé un profundo respiro y di ligeros toques a la puerta. Mis mejillas estaban rojas, no sé cómo la miraría a la cara ahora.

La puerta se abrió dejándola ver con su cabello suelto ondulado cayendo sobre sus hombros, un vestido azul marino que se apegaba muy bien a su cuerpo y unos tacones negros. Ella es lo más perfecto que he visto en toda mi puta vida, es como si ella hubiera sido susurrada por los mismos dioses.

-- T-Te ves hermosa -- dije y ella sonrió -- Te traje estas flores pero se marchitarían de la envidia al estar al lado de ti -- ella se sonroja

-- Gracias -- las toma -- Pensé que nunca ibas a tocar -- agaché la cabeza tímida ya que quería ocultar mi sonrojo

-- Es que estoy muy nerviosa -- respondí levantando nuevamente la mirada

-- Pero no estabas nerviosa cuando me decías esos otros piropos -- no podía estar más sonrojada. Si me pusieran un tomate a mi lado, de seguro me confunden

-- Amm... ¿vamos? -- dije haciéndola reír

-- Espérame, voy por mi bolso y dejo este hermoso ramo en un florero -- asentí. Se perdió de mi vista y yo me regañé a mi misma por parecer una puberta que va a tener su primera cita en su vida. Limpié el sudor de mis manos en mi pantalón. Pasaron solo 2 minutos que ella ya había salido y dejó la puerta con llave. -- Ahora si, vamos -- indiqué mi brazo y ella lo entrelazó con el suyo

-- Amm... ¿Cómo fue tu día? -- pregunté para iniciar la conversa

-- Bastante fresco, no tuve muchas cosas que hacer en LCorp -- responde y le sonreí -- Te ves demasiado tierna cuando te sonrojas -- me sonrojé aún más

-- Es que estoy muy nerviosa, no quiero meter la pata -- me sinceré y la mitad latina me miró con ternura --Y quería pedirte disculpas por mis comentarios fuera de lugar de hace meses -- llegamos a mi auto y le abrí la puerta de copiloto para rodearlo y entrar yo

-- La verdad me dabas risa intentando coquetearme -- las dos reímos por lo bajo -- Pero siéndote completamente sincera pensaba que solo me querías para algo casual por todo lo que me decías -- negué -- Ya después empezaste con tus atenciones más tiernas y románticas hacia mi que pensé en aceptarte -- sonreí

-- No soy buena diciéndole a alguien que me gusta -- dije sonrojada. Encendí el auto y por ratos desviaba mi atención de la carretera para poder mirarla a ella quien reía cada vez que me atrapaba mirándola.

Finalmente llegamos al restaurante que me había recomendado Lena, me dijo que había hecho una reservación a mi nombre. A la entrada estaban los chicos del parquet por lo que nos bajamos, siendo yo la primera para poder abrirle la puerta.

-- Muchas gracias -- le di paso al para que pudiera parquear mi auto.

Estiré mi mano hacia mi acompañante quien la recibió con gusto, caminamos, bueno ella camino porque yo intentaba hacerlo sin tropezar de los nervios.

-- Buenas noches -- saluda la recepcionista amable

-- Buenas noches, tengo una reservación a nombre de ____ Collins -- la chica revisa en su computadora y sonríe