𝑸𝒖𝒊𝒎𝒊𝒄𝒂 𝑰𝒏𝒅𝒆𝒄𝒆𝒏𝒕𝒆 ©️ #1🔥

🔥Capitulo 2🔥

(Editado)📌

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Capitulo 2

Nicolle

Detesto tener que estudiar. No entiendo por qué no nací inteligente. Parece que soy parte del uno por ciento de la población que no fue bendecida con el don de la inteligencia. Sin embargo, en cuanto a belleza, tengo más que suficiente. Poseo una mirada traviesa, una sonrisa coqueta, cabello radiante y un cuerpo envidiable. En resumen, soy la personificación de la perfección. Tengo una autoestima bastante alta; me veo como una réplica de Kim Kardashian. Sí, mi ego está por las nubes, pero ¿qué puedo hacer? No puedo decir que soy y me siento fea cuando en realidad me siento como una diosa. No es mi culpa ser hermosa; nací con ese don; herencia de mi madre.

Al llegar a la cafetería, me senté en una de las mesas. Durante la clase, el hambre me carcomía, pero tras la prueba sorpresa en la que obtuve un cinco, mi apetito se esfumó. Incluso perdí las ganas de seguir adelante. Detesto la química, esos malditos experimentos y, sobre todo, las fórmulas y números incomprensibles. Me siento arruinada, completamente arruinada. Debo mejorar mi nota en química. Pensé en sobornar al profesor, pero ese calvo me detesta y no entiendo por qué; soy atractiva y divertida, no sé por qué no le agrada mi sentido del humor. Es un hombre aburrido, y lo comprendo, está envejeciendo. ¿Qué tal si le pago por clases privadas? No, ¿a quién intento engañar? No tengo dinero y si mi madre descubre mis malas notas, me enviará a un convento de por vida. No tengo idea de qué hacer. Los exámenes parciales están a la vuelta de la esquina y necesito sacar un diez como sea, aunque no quiero llegar a extremos desesperados. Probablemente ni siquiera podría.

¡No sé qué hacer!

—¿Por qué esa cara de tragedia? — preguntó mi mejor amiga Camilla, arqueando una ceja mientras se sentaba frente a mí. Apoyé los codos en la mesa y me masajeé las sienes. Tanto estrés me está envejeciendo y tanto estudio me está volviendo loca. Camilla Schiffer es una chica pelirroja de ojos azules y puede ser un poco agobiante. Nos conocemos desde hace mucho tiempo. Su franqueza a veces no me ayuda; es muy directa y odio que sea así conmigo.

Suspiré profundamente.

—Estoy furiosa—confesé.

—¿Y eso por qué?. —Preguntó, dando un sorbo a su batido de fresa.

—Un cinco, ¡un maldito cinco, Camilla!.

—¿Otra vez?. —dijo como si no le sorprendiera. Es mi segundo cinco. ¿Pero qué puedo hacer? Intento esforzarme, pero el profesor me odia con todo su ser.

—No ayudas en nada, Pelirroja. — le dije con una mirada fulminante.

Ella se encogió de hombros.

—Deberías esforzarte más, Nicky.

—¡Eso estoy intentando!”.

—No es cierto. Solo haces bromas en clase y te la pasas coqueteando con todos en lugar de estudiar.

—Odio estudiar, Camilla. Y no coqueteo con todo el mundo. —repliqué con un tono de reproche. Ella rodó los ojos.

—¿Ah, no?.

—¡Por supuesto que no! Solo coqueteo con Tim. Y bien sabes que lo hago porque me gusta mucho.

—A ti te gustan todos, Nicolle.

Abro la boca, indignada. Como mi mejor amiga, debería apoyarme en lugar de cuestionar todo lo que hago. Además, no me gustan todos; las relaciones sentimentales no son lo mío después de todo lo que he vivido. Solo busco divertirme, eso es todo. Y Timothy Lester es justo la diversión que necesito. Es parte de nuestro círculo social, ese chico de cabello negro y ojos azules que me deja sin aliento. Es increíblemente guapo y su piercing en el labio le añade un toque de rebeldía. Es el tipo de chico que me atrae: audaz y un poco travieso. Es todo lo que necesito para despejar mi mente del estrés.