Capítulo 19

35 1 0
                                    

—¡Detente Brad! ¡Detente ahora! —mis gritos resonaron en toda la casa vacía. Aunque estuviera corriendo detrás de él, no había manera que mis piernas alcanzarán sus pasos agigantados—. ¡Brad! ¡Maldita sea!

Pero no había forma alguna de detenerlo. Estaba cegado, como un maldito caballo enfocado en un solo objetivo.

No, definitivamente no. Está vez las cosas no quedarán así, no tendrás tu maldito espacio.

—¡Brad! —grité por última vez, y como noté que seguiría siendo en vano opté por la opción más eficaz. Perdí un segundo para detenerme y arrojar mis tacones a un lado, pero luego mi carrera fue mucho más rápida que la suya. Avancé las escaleras de dos en dos, y me adelanté a su recorrido colocándome justo por delante de la puerta de su dormitorio.

—¡Alto! —grité y detuve su pecho con mi mano.

Sus pies se frenaron de golpe.

—Muévete —escuché su voz por primera vez desde que salimos del bar.

—Oh no, esto no quedará así Brad.

—Muévete Elizabeth.

Noté que intentaba manejar la situación con la poca paciencia que tenía. La diferencia era que, como de costumbre, mi paciencia ya se había agotado.

—No Brad. Tenemos que hablar —recalqué enfadada y de brazos cruzados.

—No tengo nada que decirte.

—Pero yo sí, muchas cosas de hecho.

—Me alegro. Lo hablamos mañana —intentó moverme a la fuerza, pero me planté como nunca lo había hecho.

—¡No! —exploté— ¡Las cosas no suceden cuando tu quieres que sucedan! ¡Entiende eso de una maldita vez!

—No quiero hablar contigo en estos precisos momentos Elizabeth. Hazme caso y muévete. Te lo advierto por tu bien.

—Oh mira, cuánto tiemblo del miedo —revoleé mis ojos sarcásticamente— ¿Qué demonios te sucede, Brad? Juro que intento seguirte, pero no hay forma que lo entienda.

—¿A mí? —se sorprendió con mi pregunta.

—No, a la estatua que tienes en tu habitación. ¡Si, a ti! ¡¿A quien carajos sino?!

—Muévete—. Su mirada se enfrió.

Noté otras veces que odiaba cuando el sarcasmo era utilizado con él.

✓Punto anotado.

—¿Qué pasó en el bar?

—¿Ahora te importa?

—¿Es broma? ¡Hace una hora intento que abras la maldita boca!

Sin responder, intentó moverme de mi lugar otra vez.

—¿Por qué demonios salimos corriendo de esa forma? —insistí.

Si lo consigo que sea por pesada ¿verdad?

—No hay forma que Charles haya dicho algo que te molestó porque él estaba conmigo —intenté razonar en voz alta—. Si no fue eso, ¿entonces qué fue?

—Hicimos lo que debíamos hacer, punto. Ahora muévete.

—¿Puedes escucharme una maldita vez? Solo te pido eso —suplique como si fuera mi última carta.

Pero no funcionó.

—Es la última vez que pido que te corras por las buenas.

—¡Por dios! —exclamé a los cielos—. Sé que debo ser profesional y toda esa mierda, ¡pero sí que me lo haces difícil! Y cuando pienso que avanzamos tres pasos terminamos retrocediendo diez.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 17, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

TUS SOMBRAS [ + 18 ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora