🔸️☀️capítulo XXXIII☀️🔸️

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Me desperté exaltado, mi cuerpo estaba cubierto por sudor. Toque mi rostro, lo tenía húmedo y los ojos me ardían. En el momento que desperté sentí un brazo rodeándome la cintura. Cuando gire mi cabeza hacia atrás a mi costado estaba Silena abrazando mi abdomen.

Con delicadeza me levante de allí dejándola dormir a la vez que yo me levantaba así poder agarrar su frazada y ponerla en el piso para luego hacer aparecer con un hechizo reverso una tetera y tres tazas junto a unas unos tazones de fruta y yogurt. También hice un espejo para mirarme la cara

Apenas se notaba una pequeña cicatriz en las comisuras de los labios. Pero aunque no se viera aún tenía el recuerdo vivido de lo sucedido anoche

En mi mente me dije: Cállate, no pienses en eso; ya paso, estas bien

Si. Bien

Regrese a mi desayuno con un suspiro

Mientras comía mi tazón miraba a Silena dormir a la vez que pesaba:"A nosotros nos gustaba dormir en cucharita, pero me sorprendió que no me haya despertado en el momento que se acostó conmigo. O estaba muy dormido o ella no hizo ruido"

Seguí comiendo hasta que Clarisse se despertó

Nos dimos los buenos días y ella comenzó a comer. Cuando ella ya tenía el tazón a la mitad me preguntó:

—Oye Nawaki, ¿estas bien?—me pregunto de repente. Me extrañe por la pregunta. Y más si viene de ella

—Si—afirme—¿por que no lo estaría?—le pregunte

—Bueno...con lo que pasó anoche, creí que estarías más afectado—me dijo mientras bajaba su tazón. Su mirada denotaba preocupación. Eludí su mirada—además tienes cara de preocupación, tienes la mirada perdida y ni siquiera has comido la mitad del cereal—

—clar, realmente me afecto—confesé—y—yo tuve miedo ¿Ok?, tenía miedo de que me matara, yo, creí que mi rostro no sería igual si sobrevivía, que me quedaría una cicatriz de oreja a oreja si no la podía curar ¿y si me mataba?, las habría asesinado a ustedes dos—hable con lagrimas en los ojos

Ella se coloco a mi derecha y me abrazo

—ya, ya, sácalo todo solecito—me dijo mientras yo lloraba en silencio y me frotaba la espalda con delicadeza no propia de ella hasta que me calme—¿ya estas mejor?—me pregunto. Asentí

—si, si, ya esta—le dije sonándome la nariz con mi muñeca

—ese es mi solecito mágico—hablo con orgullo—bien, ahora lo que harás es levantarte, sonreirás, te pondrás tu ropa E iremos a recorrer ese castillo para así robar ese collar o lo que sea—

—Es un palacio, no un castillo—la corregí

—lo que sea, son la misma cosa—

Estaba tentado a decir la frase de mamá odie "¿son la misma cosa? ¡no!"

Sonreí. Aunque no lo haga frecuentemente, Clarisse sabe como animarme.

Al poco tiempo Silena se levantó. Nos saludo a ambos con un buen día y se puso a comer su desayuno

En menos de 15 minutos todos estábamos listos para ir a recorrer el palacio

Mientras salíamos de aquel camión aproveche para preguntarle la razón de por qué Lena se había acostado conmigo

—bueno...me desperté como a las 5 de la mañana, Clarisse estaba durmiendo y roncando, pero tu estabas temblando además de llorando en sueños—me respondió—así que me acosté a tu lado para poder de alguna manera calmarte y eso funcionó. Te calmaste al rato—

renacer en un mundo semidivino Onde as histórias ganham vida. Descobre agora