Capítulo 24

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Era una imagen muy dulce, los niños emitieron pequeños sonidos como si fuera el estribillo, Marte era quien más se esforzaba por adquirir el nuevo conocimiento. Venus se agarraba los dedos de los pies, peor no apartaba la atención del precioso rostro de su papá, Jimin nunca había visto a su hija quieta tanto tiempo seguido.

—Jungkook ¿cómo demonios te las has arreglado?

Jungkook lo miró con ojos resplandecientes de diversión.

—Ha sido una gran experiencia de aprendizaje ¡Vaya apetito que tienen por la mañana! Se me olvidó traer unas *tronas, así que es difícil darles de comer, pero nos las hemos arreglado y también los he lavado y vestido—señaló con considerable orgullo.

Los niños sólo llevaban puestos los bodies, Jimin se aguantó la risa.

—¿Y también los has lavado?

—Pues claro... con una esponja. Venus se lo tomó como un juego, haber si me pillas—dijo Jungkook sonriendo y se levantó cuando Jimin se agachó para besar a sus retoños—¡Se dio cuenta de que soy torpe, pero insistente! Ahora soy yo el que necesita la ducha.

Había una fina capa de polvo de lo que parecían cereales en su pelo negro Jungkook se detuvo en la puerta y lo miró.

—Ahora sí que te respeto, mi amor—dijo con seriedad—¿Cómo te las arreglaste tú solo? Ha sido realmente difícil, me habrían venido bien otro par de ojos y manos.

—Lo has hecho muy bien, maravillosamente bien—le aseguró Jimin con ojos rebosantes de amor.

—No... esta vez lo he hecho pésimamente, pero la próxima lo haré mejor.

Jimin no podía creer lo atento que se estaba mostrando como padre y cómo deseaba ocuparse en persona de los niños en vez de ser un padre distante.

Mientras estaba en la ducha y Jimin se vestía, sonó su móvil, corrió a responder por si era su madre.

—Jimin

—Sí, soy yo. ¿Dónde demonios...?

—Siento haberte obligado a volver con Jungkook, todo ha sido por mi culpa ¡Tenía miedo, pero, cariño, no tienes que seguir aguantando más a ese canalla mujeriego! Voy a salvarte... ¿me oyes?

—No quiero que vengas a salvarme, mamá.

—Pero...

—Sigo queriendo a Jungkook, estamos juntos y me gustaría que dejaras de hablar de él como si fuera el enemigo público número uno sólo porque sea el hijo de Jeon Jong In—dijo con firmeza— Y lo que te conté de nuestra noche de bodas, fue un error, no estuvo con Ji Eun.

—¿No le creerás? ¡Menos mal que voy a Seúl esta misma tarde!

Jimin se puso rígido de consternación, sintiendo que lo último que le faltaba a su matrimonio era un episodio con su enervante madre.

—Pero es que no estamos en Seúl, Jungkook y yo estamos de luna de miel y aunque tengo ganas de verte y oír tu versión de lo que ocurrió con el préstamo que te hizo Jennie...

—Jimin ya le he enviado un cheque por toda la cantidad.

—¿Y cómo demonios lo has conseguido? ¿Se lo has pedido a otra persona?

—¿Cuándo volverás de tu luna de miel?

—Dentro de dos semanas.

—Bien, si tú puedes esperar dos semanas más a conocer a mi nuevo marido, supongo que yo también podré esperar a volver a mi yerno... Jungkook tiene más vidas que un gato contigo ¿eh?

UNA NOCHE CON JIMIN - KOOKMINWhere stories live. Discover now