capítulo 23.

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Jungkook estaba sentado en su escritorio, encerrado, leyendo atentamente su libro favorito, su amigo siempre lo molestaba diciendo que parecía un ratón de biblioteca, y que solo bastaría que usara unos anteojos para completar con el estereotipo cliché de un nerd.

A Jungkook le molestaba tal comparación, primero porque no se consideraba inteligente, solo le gustaba leer su libro favorito, sentía que se olvidaba de su mundo y se sumergía en un mundo completamente diferentes al suyo, como si fuese un espectador de vidas ajenas, sin intervenir ni molestar, solo observando todo, callado, silencioso. Y eso le agrada, le agradaba la idea de ser nadie en un mundo donde ser alguien, lo era todo. Su gusto por la lectura comenzó cuando leyó por primera vez un libro, donde la portada le resultó muy llamativa. Aunque solo leyó la saga completa de ese libro, y una vez terminaba de leerlo, cuando estaba aburrido lo releía.

Además de que le molestaba que su amigo lo burlara por leer tanto, y sabía que lo molestaría aún más si supiera que en verdad usaba anteojos al leer, porque debía descansar la vista. Si su amigo lo supiera, él no tendría descanso alguno.

Se encerraba en su habitación, su padre nunca estaba en su casa, pero las mucamas al verlo leer una novela le decían a su padre, y este siempre lo regañaba diciéndole: "Deberías dejar de perder el tiempo con esas tonterías, busca otro pasatiempo, eres mi hijo, un Jeon, tendrías que ponerte en el mapa como mi heredero, no esconderte en tu habitación como si fueras un fracasado depresivo" Jungkook odiaba cuando su padre lo presionaba a ser más social y cuando intentaba manipularlo para que cumpliera sus expectativas.

"Entonces, cuando la emperatriz bebió el veneno, deseando acabar con su vida, sin siquiera dejar una carta de despedida, se acostó en su cama, deseando que el veneno hiciera efecto rápidamente"

Jungkook apretaba su puño ante la impotencia, el personaje de la emperatriz era muy querido para él, lo amaba, y toda persona que leyó el libro de "La caída del emperador" odiaba realmente al emperador.

Pero respiró profundamente y se concentró en la lectura, a pesar de haber leído cientos de veces las mismas líneas.

Cuando pensó que moriría solo, escuchó una voz acercándose a él, que le gritaba, buscando un porqué, y lloraba su pronta pérdida. Lo sostuvo en sus brazos, y le pedía que no muriera.

— ¿Por qué lo hizo? ¿Por qué? — lloraba, y abrazaba su cuerpo, estando rodillas al suelo.

— No me dejes, no lo hagas. — suplicaba entre sollozos lastimeros, y la emperatriz todavía podía oírlo, abrió sus ojos lentamente, y lo miró, llorando, desconsolado.

— ¿Por qué? ¿Por qué? — repetía una y otra vez, culpandose por no haber llegado antes. Limpió su boca al verlo toser sangre.

— ¿Puedes escucharme Taehyung?, ¿lo haces?, Por favor, no me dejes, no lo hagas, yo prometo ayudarte... — decía su guardia, pero Taehyung ya había perdido la conciencia, y su corazón ya no latía.

— ¡No! ¡¿por qué?! TE DIJE QUE NO ME DEJES, POR FAVOR, TAEHYUNG, RESPÓNDEME. — abrazó su cuerpo, y tenía todavía alguna esperanza en que respondiera. 

— Por favor, ¡Por favor! NO, NO ME DEJES. — Se negaba a dejarlo ir.

Gritó entre llantos, y con su adolorido corazón, Yoongi gritó fuerte su pérdida, la pérdida de su Emperatriz. La pérdida de la primera persona que lo trató como un ser Humano.

Me Convertí En el Esposo Del Emperador (Kooktae)Where stories live. Discover now