#Taletober2022: Gemelos
#Huectober: Cometa
En su infancia, Kaiden no se detuvo mucho tiempo a observar el cielo. Tenía cosas mejores que hacer, le decían: tenía que entrenar, ser el mejor de la clase, tal vez, un firme general que ayudara a preservar la paz.
Paz. Eso era lo que buscaban, al final, sus ancestros, sus hermanos, sus compañeros de armas... o los que lo fueron, en todo caso. Y al mismo tiempo, solo sabían de la guerra.
«Ojalá pudieran ver», pensó el joven, y siguió observando las estrellas, buscando una pista para salir del infierno, del laberinto, para volver a abrir los ojos, de verdad, y regresar a casa, su verdadero hogar.
Pasó largo tiempo mirando el cielo, hasta que dejó de oír el crepitar de las llamas, inhalar el humo, ver el fulgor del fuego. Y entonces, cuando poco a poco el mundo se sumía en la oscuridad y solo quedaba la luz de las miles de constelaciones, vio el cometa cruzar el firmamento.
En línea recta, la estrella fugaz pasó sobre su cabeza, y Kaiden lo siguió con la mirada hasta que lo vio ocultarse tras los picos gemelos que había en la distancia. La lava se había quedado en charcos y ríos que ennegrecían, endureciéndose. La luz era ahora casi toda de aquel cielo despejado.
Respirando hondo, el joven soldado echó a andar, siguiendo el camino que la estrella había marcado.
YOU ARE READING
TaleTober 2022
FantasyNuestra participación a tres retos Taletober 2022 (de mano de EcosDeTinta, Huecoliterario e inkarnate) cuenta el viaje de un soldado que, caído en batalla, lucha por regresar a la vida... y a su familia. ¿Pero quién es, y cuál es su historia? Cada...
