Fool

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   Llegando de un castigo que Aizawa le había colocado, Bakugo Katsuki se encuentra de mal. Le irritaba tanto cuando le decían qué hacer, sobre todo cuando no podía negarse.

Entra a la sala común de los dormitorios, la cual se encuentra extrañamente silenciosa. Todos los extras debían estar durmiendo, lo que venía de maravilla. No estaba de humor para tener que lidiar con nadie en ese momento, sobre todo con Deku. Le culpaba de su castigo, no había nadie más a quien apuntar y hacer responsable del mal humor de ese día en especial.

Con el estómago vacío, hambriento, Bakugo se dirige a la cocina. Pasando por un lado de uno de los sofás del lugar, inmediatamente algo llama su atención haciendo que se detenga. Fue algo pequeño que vió por el rabillo del ojo. Girando la cabeza para verificar qué era, frunce su ceño con aún más molestia de la que sentía al principio. Lo que había visto era la cabeza mitad-mitad del bastardo de Todoroki, quien estaba durmiendo tranquilamente allí sobre los cojines. Debía ser imbécil para quedarse a dormir en un lugar así usando simplemente una camiseta. Aún usando el uniforme, Katsuki podía sentir el frío del invierno que se acercaba.

Bufando a medias, decide que no le importa, así que se dirige a la cocina para prepararse algo de comer; su plan inicial. Sin embargo, cuando da un paso en esa dirección, algo le hace darle una mirada más al bastón de caramelo que era Todoroki. Entonces gruñe y, antes de irse a cocinar, se quita la chaqueta de la escuela y crubre al imbécil de su compañero de aula.

No estaba haciendo nada amable, simplemente no iba a ensuciar la chaqueta, prefiriendo dejarla sobre el estúpido de Todoroki. No es como si le importara si sentía frío o se congelaba como una paleta, no es como si estuviera acomodando la tela sobre él de la manera que le cubriera todo lo posible.

...

Y cuando Katsuki regresa de la cocina con un plato en su mano, sentandose en el piso frente al mueble donde Todoroki sigue dormido, no significa nada. Simplemente no quería comer solo en la enorme mesa del comedor. Y no, no significaba que aceptara que Shoto era una buena compañía ni siquiera dormido. No significaba una mierda.

...

Luego de comer y lavar los platos, Bakugo regresa a la sala por su mochila y chaqueta,  tomando la primera para detenerse cuando extiende la mano hacia la prenda sobre Shoto. No sabe por qué, pero no puede simplemente tomarla.

Quizás sea la manera tan cómoda en que Todoroki parece estar durmiendo con ella, o la sensación de culpabilidad que sentiría si la tomara para dejar a Shoto nuevamente congelándose allí. Hay algo en el estúpido rostro durmiente del bastardo bicolor que le hace detenerse y cuestionar todo.

—Maldita molestia. —suelta con frustración mientras se echa la mochila al hombro, girandose para irse a su habitación. Pero, en cuando da unos pasos al ascensor, se regresa rápidamente para no sólo tomar su chaqueta, sino a la persona debajo de ella también. —Eres un estorbo en todos lados. —refunfuña sin sentido. —¿Qué eres, un niño pequeño? Quedarte dormido en el mueble ¿Te quieres enfermar, estúpido bastardo?

—No.

Bakugo se congela cuando escucha una respuesta que no esperaba, sorprendiendose cuando baja la mirada al rostro de Todoroki para encontrar que está despierto. —¿¡Estabas fingiendo dormir, maldito fenómeno!? —grita soltando a Shoto, quien por suerte se esperaba esa reacción, así que no cae de golpe al suelo.

—No. —repite con simpleza y sinceridad. —Pero es difícil seguir durmiendo cuando alguien te está hablando mientras te carga. —explica. Estaba durmiendo profundamente, sí, pero luego escuchó a Bakugo refunfuñar demasiado cerca. Cuando abrió los ojos, descubrió que le tenía en brazos. Era algo que le costó comprender. —¿Me llevabas a mi habitación? —pregunta.

Dejando de decir groserías, Katsuki se cruza de brazos para de mala gana decir: —Si. —detras de su enfado, lo que realmente estaba sintiendo era vergüenza.

—¿Me cubriste con tu chaqueta? —Todoroki pregunta agachandose para tomar la prenda que si había caído al piso cuando Bakugo le soltó.

—No te hagas ilusiones. —el rubio reacciona rápido al quitarle la chaqueta de la escuela de las manos.

—¿Ilusiones? —no entendía.

—¡Olvídalo! —era inútil tratar con alguien tan denso como a veces olvidaba era Todoroki.

Tras un pequeño intervalo de silencio en el que Shoto decide aceptar olvidar lo que sea que deba olvidar, lo interrumpe para decir: —¿Por qué la gente piensa que eres espeluznante? —lo que vuelve a dejar un espacio de silencio.

—¿Crees que soy espeluznante? —Bakugo había escuchado que le decían de un montón de formas, no le interesaba, pero por alguna razón siente la necesidad de preguntarle a Todoroki qué opina sobre eso.

—Si. —este dice, lo que extrañamente se siente un poco desalentador por alguna razón. —Pero también eres bonito. —Y oh mierda... —Y creo que hueles un poco bien. —¿Qué? Este chico realmente era raro, pero quizás él también, porque de alguna manera eso le hace sentir mucho mejor luego de saber que Shoto le consideraba espeluznante.

—Entonces... —Katsuki tose un poco para que las cosas no se sientan tan raras como se siente luego de que Todoroki dijera esas tonterías de él. —¿Ahora quién es el espeluznante? —bromea porque, joder, ¿qué más puede hacer? Siente su corazón latir extrañamente rápido, no puede dejar de reproducir en su cabeza las palabras del bastardo mitad y mitad.

—Oh, lo sigues siendo tú. —Y Shoto no dice más, saliendo del ascensor cuando este abre las puertas en su piso. Le da una última mirada a Bakugo, agradeciendo su amabilidad con una sonrisa pequeña que le hace lucir un poco lindo, pero ¡No significaba nada pensar eso!

Joder, era mejor si mantenía la distancia del tonto de Todoroki por un tiempo.

O.S 🌸 [BakuTodo]Where stories live. Discover now