O.S 🌸 [BakuTodo]

Katsuo

💥❄️🔥

( relación establecida )

   Cuando Shoto despierta, no hay nadie más que su pequeño hijo durmiendo entre sus brazos. Es un sábado por la mañana tan tranquilo que incluso quiere seguir durmiendo, pero tienen planes para ese día. No era sencillo que le dieran un día completamente libre al mismo tiempo que a Bakugo, pero lo habían conseguido.

Shoto tuvo que rogarle (amenazar) a su padre para que le permitiera a los dos héroes número uno tener un día libre a la vez. Hawks fue el más razonable en toda la discusión. Igual, la ciudad no sería destruida sólo porque ellos no estaban, había más héroes; no sólo de su agencia.

Sintiendo a su hijo despertar, Shoto le da una mirada, encontrando los hermosos ojos  carmesí de Katsuo; eran los mismos que Bakugo, la misma intensidad brillante y hermosa. —Buenos días. —le saluda acercándolo para un beso en su cabello rubio con mechones rojos.

—Buenos días. —el pequeño Katsuo saluda a su papá con una sonrisa brillante, sentandose en la cama para besar la frente del adulto. El pequeño hijo de Shoto y Katsuki era simplemente un ángel, era dulce y amable, brillante como una estrella. Algunos se atrevieron a bromear con que no se parecía en nada a Bakugo, comparándolo más con Izuku en cuanto a personalidad. Esas personas estuvieron dos semanas en el hospital.

—Oigan, muevanse, el día se irá volando si se quedan allí. —Bakugo, entrando a la habitación, se encuentra con sus dos personas especiales recién despiertas. —El desayuno está listo. —dice mientras observa a Shoto sentarse en la cama. Se acerca, despeinado a Katsuo para inclinarse cerca de su esposo y darle un beso de buenos días.

Su pequeño hijo ve esto, sintiéndose un poco excluido entre los saludos de buenos días de parte de su padre. ¡El también quería un beso! Así que protesta en voz alta, ganando la atención de ambos adultos, quienes se miran y se sonríen. Se burlan un poco por las mejillas infladas de su hijo, quien las señala pidiendo un beso. Era tan adorable.

Bakugo, tomando a Katsuo de la cama, le sostiene en sus brazos para darle un beso en la mejilla. —Vamos a desayunar. —le dice con una sonrisa ligera que sólo le pertenecía a Katsuo y Shoto. —Ven. —le da una mirada a su esposo, extendiendo una mano para que la tomara.

Shoto no tarda en aceptarla, entrelazando los dedos para salir de la cama y seguir a Bakugo hasta la cocina. Es una mañana sencilla en familia.