Capítulo 11: En llamas

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El día sábado, ambos hombres salieron al jardín de la casa mientras se besaban, llevaban carne para hacer una deliciosa barbacoa en la parrilla, gracias a la idea de Jaemin, el clima estaba demasiado cálido, estaba para una fiesta en la piscina con rica comida.

—¿La has usado alguna vez? — Jaemin notó que la parrilla estaba en tan buen estado, como si jamás la hubieran ocupado.

—Esta será su primera vez — le respondió mientras reía por el doble sentido.

—Es virgen igual que yo — respondió Jaemin sonriendo, poniendo la carne sobre el fuego de la parrilla.

—Si claro, el Jaemin que cojeaba esta mañana no dice lo mismo — Jaemin le dio un leve golpe mientras reían, Jeno se lo devolvió, pero en el trasero — Hace demasiado calor, vamos a la piscina.

—No traje un bañador — ¨Tampoco tengo uno¨ pensó Jaemin haciendo un puchero.

—Podría prestarte uno — respondió Jeno, pero al ver a su precioso muñequito sólo con una playera se le ocurrió una idea — Pero, será más interesante si te metes desnudo.

—Espero que Daddy también lo haga — Jaemin enredó sus brazos sensualmente alrededor del cuello de Jeno, dejando un pico en sus labios.

—Lo siento muñeco, yo tengo mi bañador puesto — respondió Jeno con una falsa expresión triste.

—Bueno, entonces — hizo un leve puchero mientras bajaba su bóxer y después se quitó la playera, dejando expuesta su desnudez, Jeno gruñó, a ese niño le encantaba calentarlo, Jaemin con voz cantarina y seductora le dijo; — Te veo allí, Daddy.

De la misma forma se alejó de la zona de la parrilla caminando hasta la enorme piscina, Jeno no despegó la vista ni un solo segundo, viendo la preciosa figura de Jaemin por detrás, por poco se le caía la saliva, bajó su vista al bañador y como lo esperó tenía un gran bulto en su zona baja.

Jaemin disfruto la helada agua sobre todo su cuerpo, nadó un buen rato como si fuese un niño, la piscina era espectacular, Jeno se sentó en la orilla de la piscina metiendo sus pies, miraba a su chico con una sonrisa boba en el rostro, no entendía lo que le estaba sucediendo.

El más joven nadó hasta donde Jeno, quedando entre sus piernas abiertas.

—¿Puedo ayudarlo, Daddy? — habló Jaemin llevando su mano a la erecta polla de Jeno aún atrapada en el bañador.

—Será un placer.

Jaemin empezó a dejar besos sobre ésta por arriba de la delgada tela, con sus manos acarició sus fuertes piernas, sus manos hicieron un camino hasta la orilla del bañador y sin esperar más, lo bajó de un tirón, lanzándolo hacia el pasto.

Los ojos del más delgado miraban con deseo la erección que tenía delante de él, empezó dando besos en el glande, luego dio una lamida dese los testículos hasta la punta, saboreando con su lengua el largo de la extensión, haciendo que Jeno soltara un gemido de inmediato.

Sin esperar más tiempo, con su mano derecha tomo la base y llevó sus labios alrededor de la punta de la erección, succionando el glande con fuerza, ahuecando sus mejillas y dándole una mirada sensual a Jeno, provocando que este cierre sus ojos mientras suelta un largo gemido, Jaemin comenzó a succionar más, dejando su mirada fija en el rostro de Jeno, movió su cabeza de adelante hacia atrás, relajando su garganta para poder tomar más, Jaemin quería tragarla entera. El Ceo se inclinó un poco hacia atrás para apoyar sus antebrazos en el pasto, se sentía demasiado bien, hace años que no recibía un oral y ver como Jaemin follaba su propia boca con rapidez sin despegar su vista de él, se coronó como la mejor mamada que le habían dado.

Amor al estilo Balenciaga - NominDonde viven las historias. Descúbrelo ahora