¿𝗣𝗮𝗿𝗮 𝗦𝗶𝗲𝗺𝗽𝗿𝗲? | ᵉˣᵉᵠᵘⁱᵉˡ ᶻᵉᵇᵃˡˡᵒˢ ✓✓

𝟔𝟏

⬞╭╰ａｇｕｓｔｉｎａ╯╮⬞

— ¿Ya tenés todo hijo?. –mire a Lionel.

— pa ¿Va el tío Julian? Es lo único que quiero saber, aparte, papá Noel ¿Cómo va a hacer para encontrarnos?. –me cuestiona.

Nos vamos a un pueblo cerca de acá, quedaba a un día, 24 horas viajando. Pasamos navidad y año nuevo allá. Vamos con Julian y Ornella, un viaje de amigos, también para cambiar los aires un poquito.

Prepare a las bebés con cuidado, mientras seguía diciéndole a Lionel que tenía que prepararse también, el chango estaba organizando el auto.

— no me respondiste ma, tenés que responder mis preguntas. –me habla saltando la cama.

— deja de saltar, anda a preparar tus cosas Ramiro, me estás haciendo enojar. –lo rete mientras terminaba de cambiar a Alma.

— ya está todo preparado, ¿Va el tío Julian o no? Responde.

— si va tu tío Julian, cortala Lionel enserio.

Rueda los ojos y se baja de la cama para salir de la habitación, me pongo una calza para estar cómoda en el viaje y un buzo grande, también del más grande, boquita.

Cuando me estoy terminando de arreglar el pelo entra Exequiel a la habitación, él estaba con su jogging del city y una campera deportiva arriba, la gorrita... La gorrita que nunca podía faltar.

— que hermosa te queda esa calza loco. –siento que me pega en el culo.

— están tus hijas presentes y vos me golpeas. –lo mire mal.

— pero mis hijas todavía no entienden mi reina. –se acerca a darme un beso, estaba hermoso.

— Lionel estaba en modo histérico, anda a ayudarlo.

— bueno amor, vos prepara las cosas de Osito porfa, su comida y manta.

Se va de la habitación y yo me quedo mirando hacia la puerta... Si, porque también va el perro, no puede faltar nada.
Agarre la comida y la subí al auto, también su manta que la puse en la parte de atrás de la camioneta.

El chango sube a nuestros hijos, Lionel en el medio que se estaba quejando por el cinto. Agarre las cosas del mate que no podían faltar nunca, cerramos la puerta bien y ya arrancó el auto.

— con Julian y Ornella nos encontramos en la gasolinera. –me avisa el chango.

— bueno amor, cuando agarres la ruta empiezo los mates. –le di un beso.

— si por favor, hijo ¿Vos vas bien?. –le pregunta a Lionel.

— si, mami ayúdame hacerle la cartita a papá Noel. –me mira emocionado.

— pero amor ya hiciste la cartita en casa. –me reí.

— ay pero ma, ahora vamos a otra cosa, me deja regalitos en esta que vamos y en nuestra casa también. –rueda los ojos obvio.

Con el chango lo único que hicimos fue mirarnos, impresionante como la pensó, cuando quería usaba la mente el mini Zeballos.
En el lugar para cargar nafta nos encontramos con Julian y Ornella, me acerque al auto de mi amiga.