Capítulo 22:

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Mi hermano comenzó a ayudar a mi papá a arreglar y poner una puerta nueva en mi dormitorio. Mientras tanto, mi mamá y yo hablando mierda de mi hermano en la sala.

"Tu hermano definitivamente está fuera de lugar t/n" dijo mi mamá

"¿Por qué está actuando así? Solo hablaba de códigos y esas mierdas" —dije.

"Supongo que la gente en el ejército tiene muchos códigos, ya sabes cómo es cariño"

"Códigos estúpidos", dije.

Mi hermano y mi papá entraron.

"Tu dormitorio está listo, puedes subir y encerrarte de nuevo" Dijo mi hermano.

"¡N/t/h" gritó mi mamá.

"Lo siento" Dijo él.

"T/n, ¿por qué no vas arriba? No para encerrarte, pero tu mamá y yo necesitamos hablar con tu hermano" Dijo mi papá.

"Bien" hice caso y me dirigí a mi habitación.

Tuve la genial idea de llamar a mi mejor amig@ para contarle todo lo que había pasado. Iba a ser una llamada larga, pero necesitaba saber.

Estuvimos horas en la videollamada, pero entendió, parecía estar más emocionad@ que yo. Se volvió loc@ cuando le conté cómo ha estado actuando mi hermano y que peleó con Alejandro, quedando como un tonto por supuesto porque perdió.

N/t/ma: Estás completamente loca t/n, ¿cómo sucedió? No has dicho nada al respecto, eres una perra y una puta. Eres una chica muy mala, una chica muy, muy, mala, mala t/n.

Yo: "Sonaste como Beyonce hablando con Gaga en ese videoclip"

N/t/ma: "Lo sé, puta".

Alguien llamó a la puerta nueva.

Yo: "Tengo que dejarte ahora, te llamo más tarde"

N/t/ma: "Adiós perra"

Abrí la puerta, era n/t/h. Lo miré fijamente durante unos segundos.

"¿Qué quieres?" Yo pregunté.

"Mira, todo este tiempo, desde que desapareciste, he estado preocupado por ti, cómo has estado, dónde has estado, con quién, todo. Creo que te vi vulnerable, muy vulnerable después de lo que pasó, y sentí la necesidad de protegerte como sea, de todo, y de todo digo, de todo. ¿Tú entiendes?"

"¿Sí? ¿Entonces?" Pregunté, eso no lo justificaba.

"Te amo t/n"

"Yo también te amo, pero no lo demuestras"

"¿Qué está pasando realmente entre tú y... Alejandro?" Preguntó.

"¿Quieres que te diga la verdad?"

"Sí." Él suspiró.

"Él me propuso ser su novia..."

Me miró sin siquiera pestañear.

"Está bien, ok..."

"¿Estás actuando así otra vez?"

"No, solo... ya sabes, voy a necesitar tiempo, para... asumir todo esto"

"¿Por qué es tan malo para ti?" Le pregunté.

"No quiero que salgas lastimada, no quiero que te... involucres en nada de esa mierda"

"¿Qué mierda n/t/h? ¿Qué diablos sabes?"

Se quedó en silencio.

"N/t/h estoy hablando contigo!"

"Deberías hablar con él, lo antes posible" Salió de la habitación.

Mi cuerpo se congeló, Alejandro me estaba traicionando eso seguro, pero no quería creerlo. No sabía si mi hermano estaba hablando en serio o estaba siendo un imbécil. Necesitaba respuestas, mi cerebro estaba a punto de explotar. Iba a dirigirme hacia Las malditas Almas.

Ya era de noche, todos durmiendo, momento perfecto para ir allí y confrontar a Alejandro de una vez. Le dije a n/t/ma lo que iba a hacer esa noche, en caso de que me pasara algo en el intento.

Primero, me aseguré de que todos durmieran profundamente, segundo, me duché y también me aseguré de verme y oler bien en caso de que tuviera que romper con él. Todo mi cuerpo temblaba, estaba tan nerviosa que sentía náuseas todo el tiempo.

Tomé el auto de mi mamá, ella siempre dijo que podía tomarlo para cuando tuviera una emergencia y esta definitivamente era una. No estaba muy segura del camino a esa base, pero traté de recordarlo, por suerte, me perdí solo un par de minutos, tenía buena memoria.

Estacioné el auto lejos de la puerta, me acerqué con cuidado, cuando un vaquero me detuvo.

"N/t/h me envió aquí, dijo que ya no estaba segura en t/c, probablemente me recuerd-"

"¿Eres t/n?" Preguntó el vaquero con su acento.

"Sí, soy t/n" respondí.

"Sígueme"

Seguí al chico dentro de la base, me puso en la misma habitación que estaba cuando llegué a la base por primera vez, podía recordar haber besado a Alejandro allí, pero rápidamente me enojé con él nuevamente.

"¿Dónde está Alejandro?" le pregunté

Él no respondió, solo salió de la habitación.

Necesitaba buscar a Alejandro, tenía que estar en algún lugar de la base. Salí de la habitación y di vueltas esperando encontrarlo. Mi curiosidad me llevó a la habitación donde estaba retenida Valeria, la puerta estaba entreabierta, como antes. Me acerqué lentamente, tratando de no hacer ruido, nadie vigilaba la puerta, así que aproveché.

Miré con cuidado quién estaba dentro, era Soap. Él la estaba interrogando sobre ese terrorista cuyo nombre olvidé. Pero aún necesitaba encontrar a Alejandro. Espera... ella también podría responder a mis preguntas... Era mi momento de confrontar a esa puta.

Soap intentó salir de la habitación cuando entré rápidamente antes de que cerrara la puerta.

"¡Hey! ¿What the fuck? Él gritó.

Valeria se levantó rápidamente para quedarme mirando con los ojos super abiertos.

Mi soldado - Alejandro Vargas y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora