4. DUNDIES AWARDS

1.3K 123 31
                                    

NARRA T/N: 

Los días comenzaban a pasar realmente rápido, finalmente estaba haciendo cosas relacionadas con mi práctica como contadora, Kevin comenzaba a darme su trabajo con la escusa de que esto me serviría para poder titularme y de igual manera el ser mi tutor, sabía que no era cierto, pero era mejor a no estar haciendo nada.

— ¿Sabes que Kevin es un perezoso verdad?— pregunto Luke.

— Lo tengo muy claro — dije.

— No deberías esforzarte tanto — dijo sonriéndome—Jamás veo a nadie esforzándose aquí.

— Yo podría ser la diferencia —contesté.

— Suena como algo que dirías tú.

— Luke, trajiste lo que te pedí—era Michael que venía llegando a la oficina.

— ¿Que cosa? — pregunto.

— La cosa, ya sabes — comenzó a decir — para que sepas T/N, hoy jugaremos un partido de basquetball con los de la bodega y en la noche será nuestra premiación de Dundies, por si quieres bajar a darnos ánimo como porrista — ven vamos a conocer la bodega, no te la he enseñado.

— ¿Puedo ir? — volvió a preguntar Luke.

— ¿Quieres acompañarme a mí o quieres ir porque T/N irá conmigo? — pregunto Michael.

— No conozco la bodega — respondio.

— Ay, Luke no mientas, te he visto dormir abajo un montón de veces —volvió a decir Michael.

— ¿Pero puedo ir?.

Sus reiteras preguntas me hacían mucha gracia, y me alegraba que cada vez comenzáramos a ser un poco más amigables entre ambos.

— Está bien, vamos los dos.

***

—Esta es la bodega o el orfanato —comenzó a decir mientras bajábamos las escaleras— Pero ustedes no le pueden decir así, solo yo, porque gane ese derecho.

— No te preocupes, nadie le dirá así de cualquier modo — dijo Luke bajando delante de mi.

Mientras bajaba los escalones iba prestándole atención a la bodega, ya que nunca la había visto, alguno de los chicos ya estaban practicando con el aro de basquetball, por tanta distracción pise mal un escalón y casi caigo, pero Luke había alcanzado a tomarme de los brazos, cosa que hizo que quedáramos muy cerca el uno del otro.

— ¿Estás bien? — pregunto mientras trataba de estabilizarme otra vez en la escalera —no debes ir mirando otra cosa si bajas, ¿qué pasa si hubieses caigo?, dudo que Michael amortiguaría la caída tan bien —dijo riendo.

— Muchas gracias, qué vergüenza —dije, me había dado más vergüenza haber quedado a escasos metros de él que de caer.

— Michael nos miró a ambos y siguió bajando — los necesito concentrados.

***

Era la hora de almuerzo, y por ende la hora del partido - ¿Están listos para jugar chicos?.

— Nos pagarás la hora del almuerzo — pregunto Stanley.

— Claro, a todos, negocios son negocios —dijo.

Michael se acercó a mí.

— ¿Nos estarás apoyando pequeña? —pregunto.

— Todo sea porque ganemos —respondi.

THE COUNTER - THE OFFICE [LUKE Y TÚ]Where stories live. Discover now