ELEVEN

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HOSEOK


Por supuesto no había sido fiel a mi palabra, de "Solo una vez más" y tres días después, había terminado follado y estúpidamente feliz entre los brazos de Kim Taehyung. No recuerdo y ya había perdido la cuenta de cuantas veces había dicho, que sería la última vez. Me lo había repetido como un mantra, tratando de insertarlo en mi cabeza cada noche, cuando la culpa me invadía, después de quedar solo en mi habitación. Pero lo que más empezaba a preocuparme, eran los sentimientos cada vez más fuertes, que estaba empezando a adquirir por Taehyung.

En estos tres días que han pasado, he tenido a Jimin y Jennie detrás de mí, por mi cambio de planes. Les había dicho que lo intentaría e iba a quedarme los meses que fueran necesarios por el abuelo y aunque Jimin al principio dudo, finalmente lo acepto y prometió, que no le contaría nada a mi padre y Sejun, de lo que había sucedido entre Kim Taehyung y yo. Me sentía como un completo hipócrita, al mentirles, pero ya estaba demasiado metido en esto y ahora que había probado y conocido más allá, de Kim Taehyung, decidí que quería más de él. El pensamiento posesivo era vergonzoso, mortificante e inquietante. Nunca antes, me había sentido así por alguien, y por ese motivo todas estas sensaciones, eran nuevas y abrumadoras para mí.





(...)

Era la 1:35 AM, cuando Taehyung, apareció como cada noche en mi puerta. Abrí la puerta y dando un rápido vistazo al pasillo, me hice aun lado, dejándolo pasar. Cuando cerré la puerta tras de mí y giré en mis talones, Taehyung no perdió tiempo y estampo sus labios, con los míos. Sus manos se deslizaron por mi cuello, apretándome suavemente la garganta. Con los pulgares me echó la cabeza atrás. Sentí la presión de sus labios contra los míos, con tal fuerza que impidió salir lo que fuera que estuviera a punto de llamarle. Sus manos bajaron hasta mis hombros, rozaron mis brazos y se posaron en mi región lumbar. Sentí ligeros escalofríos de pánico y placer. Intentó estrecharme contra él, y yo le mordí el labio.

No hubo espacio para la duda. Sus labios estaban sobre los míos y dejé de respirar. Me estremecí y de mi garganta salió un sonido que era, mitad quejido, mitad gruñido. Sentí escalofríos de placer y el pánico me invadió al ver que me besaba con más intensidad, separándome los labios. Ya no pude pensar en nada más. Me aparté de la pared y sellé el minúsculo espacio que quedaba libre entre nosotros apretándome contra él y enterrando los dedos en su pelo; era tan suave y sedoso. Sentí que me encendía y que el corazón me iba a explotar. El abanico de emociones que experimentaba era enloquecedor, Me asustaba y me excitaba a la vez.

— No hagas eso—musitó el con una advertencia en los ojos.

— ¿El qué? —Pregunte inocentemente, humedeciéndome los labios con la lengua.

— ¡Joder, eso! —gimió Taehyung, con la respiración acelerada.

Una vez más, Taehyung me agarró por el cuello y me besó nuevamente en la boca, anhelante, intenso, y lleno de pasión. Me atrajo con firmeza hacia él. Entreabrí los labios y su lengua rozó la mía, incitándome a abrir la boca. Separé los labios con un gemido y me estremecí, cuando Taehyung dejo que su mano vagara, por mi abdomen. Incapaz de pensar, solo consciente de su sabor, dejé que su lengua provocara la mía y lo saboreé con avidez, mientras el me apretaba contra sus caderas, besando con más fuerza, exigiendo la respuesta que estaba provocando en mí.

Después de un par de segundos, de degustar el sabor del otro, me separé lentamente de sus cálidos labios, que tanto deseaba y solté un largo suspiro. Miré a Taehyung con una expresión de persona enamorada y le sonreí, rogando no verme tan patético, como me sentía. Taehyung me sonrió de vuelta, aliviando la extraña sensación y una extraña sonrisa, se extendió por su rostro, mientras me miraba fija e intensamente, acariciando mi mejilla.

FORBIDDEN LOVEWhere stories live. Discover now