EIGHTEEN

262 29 5
                                    


"Porque eres todo cuanto necesito y no podría vivir, sin tu compañía ni tu manera de ser. Podría volver a nacer y revivir todo cuanto estamos pasando, con tal de conocerte de nuevo y no perderme ni uno solo de tus gestos. Porque por ti, vale la pena pasar por todos los obstáculos del mundo" ...



DÍA DE LA BODA.

5:58AM

TAEHYUNG

Despertar.

No de un profundo sueño donde tus palabras callan y tu mente no deja de girar. No de una pesadilla donde corres angustiado sin saber cuál es la última parada. Despertar quiero decir golpear con fuerza tus sienes sintiendo que algo ya no tiene sentido. Que la desconexión fue un éxito y el sueño triunfó sobre la dureza de un mundo cada vez más desorbitado. Despertar quiero decir, sin más, despertar de todo aquello que creemos no poder hacer, cuando en realidad lo único que hemos hecho para conseguirlo es nada.

Alguna vez, hace mucho tiempo, quizás no tanto, me propuse romper con la fragilidad de mi mente. En mi amor propio quise encontrar la verdadera realidad de mi existir humano y en mi caparazón de cota de malla quise descansar de angustias que eran ya casi un candado a la desesperación. Sin embargo, me quedé en el intento y me perdí buscando la razón de mi existir.

Alguna vez, hace mucho tiempo, había creído que Lía era mi Helena, la mujer por la que sería capaz de armar una guerra similar o aun peor a la de Troya. Que había encontrado el amor en un mundo lleno de fantasías e ilusiones, donde el amor, era un privilegio para las personas más afortunadas. Con Lía, todo había sido tan inofensivo y tranquilo, que en ocasiones sentía que nos estábamos perdiendo. Que nos hacía falta algo. E incluso, que nuestra conexión inicial se había roto. Y no me malinterpreten. No es que este diciendo que nunca ame verdaderamente a Lía, porque sería un eufemismo. La ame. Pero aun así no fue suficiente para ser feliz. Quizás, simplemente me había equivocado. Porque definitivamente, había visto las señales, las alarmas en mi cabeza habían sonado, pero todo aquello lo había ignorado en su momento, creyendo que eran supersticiones en mi cabeza. Pero con Hoseok...

Había caído por Hoseok desde que lo había visto por primera vez. Con cada momento que habíamos pasado juntos, había caído un poco más profundo. Cada día vivido a su lado, se había sentido como vivir en un libro o una película, solo esperando el momento para estar con él, deseando que lo vivido nunca terminase. Hoseok, sin darse cuenta, me había enseñado que el verdadero amor es paciente, perdona, acepta, ayuda, cree, entiende y nunca se rinde. Que el amor podía ser intenso, sin necesidad de ser sofocante y que este no mide, simplemente da. Hoseok, me había enseñado a vivir el momento y que el amor no tenía límites. Hoseok, sin duda alguna, se convertido en la calma después de mi tormenta.

Una vida perfecta no es aquella que está libre de problemas. No. Una vida perfecta, es la que te enseña a través de las dificultades a ser mejor, y a valorar todo lo que tienes. Así que no hay nada, por lo que debas privarte a ti mismo, para no luchar, por algo o por una persona que quieras... Se valiente y esfuérzate hijo mío.

Las palabras de mi madre habían sido todo lo que necesitaba, para tomar la determinación de luchar por Hoseok.

Se feliz.

Mi felicidad era Hoseok y ahora sabía lo que debía de hacer para perseguirla.






(...)

FORBIDDEN LOVEWhere stories live. Discover now