Capítulo 16

189 17 24
                                    

Reto de baile.
(***)


El Yambani está demasiado animado hoy. Normalmente no suele llenarse mucho, sin embargo esta tarde tienen puesto el estéreo demasiado alto y se nota que hay algo muy interesante dentro.

La música suena bastante animada, hay bullicio entre la gente, y no he podido dejar de mirar hacia allá con insistencia y ambos ojos entrecerrados. Como sospechando de lo que sea que puede estar ocurriendo en esa parte dentro del establecimiento.

– Pasa algo ahí... – susurro observando con detenimiento el punto del salón principal donde la mayoría de la gente anda reunida. Towa asiente desde la mesa donde estamos sentadas, y se lleva el refresco gaseoso con ambas manos nuevamente a sus labios.

Setsuna no se encuentra con nosotras ahora mismo, creo que se quedó a ayudar a la Ancina Kaede dentro de la residencia en donde viven. Es por eso que la albina se encuentra solo conmigo, y es mejor así, la presencia de su hermana sería demasiado molesta, y no quiero arruinar mi día con sus típicos comentarios de "chica perfecta"

De todas formas, su presencia no hubiese cambiado mucho la estadía tampoco. Hoy ha sido bastante aburrido, y sin nuestras características peleas también se ha tornado demasiado silencioso. Últimamente me he sentido rara conmigo misma, todo me aburre, todo me agobia, incluso siento que la gente ruidosa y demasiado "feliz" me ostina.
Creo que estoy en mis días de mierda. Aquellos en donde me vuelvo alguien demasiado pesimista, y absolutamente todo me molesta a grandes escalas. He intentado buscar un modo de relajarme, me encuentro estresada y no lo entiendo la verdad.

Seguramente sean los parciales y exámenes del cole que se acercan. Ya los maestros andan mandando todas sus típicas pullas e indirectas para los suspensos de la clase, y debo decir que no estoy entre ellos, por muy maravilloso que suene dadas mis características. No tengo ni que mencionarlo, es bastante evidente que no me gusta estudiar, de hecho no soporto tomar un maldito libro. Pero soy de los que al final se sacan sobresalientes sin saber cómo y terminan con tremendas caras de idiotas; en mi caso debe de ser por alguna herencia de familia o algo. Porque no me puedo creer que mi cabeza diera por si sola para tanto.

Y si me pongo analizarlo con más detenimiento, realmente no creo que sea la escuela lo que tanto me preocupa. Así que no sé que me pasa pero tengo un "que yo" desde hace días que acaba con toda mi paciencia.

– ¿Y si vamos a ver que ocurre? – sugiere Towa. La he notado muy concentrada hacia allá y creo que siente curiosidad por saber que diablos ocurre entre ellos y todo el alboroto que han armado – se ve bastante animado ahí.

– mmmh...– me encojo de hombros y hago una mueca de completo desinterés ¡pero a quién diablos engaño! Yo también muero por saber – no tenemos nada que perder si chismoseamos un poco – comento dándole una miradita persuasiva al rincón amontonado.

Me levanto de mi lugar. Del bolsillo delantero de mi pantalón, saco un pequeño chicle azúl que masco haciendo "globos" en mi boca. Acomodo el buzo abierto y rojo que traigo por encima del top oscuro; y también la gorra gris sobre mi cabeza, dejando que todo mi cabello ruede por mis hombros y laterales, deslizándose libremente hasta el centro de mi espalda como una cortina azabache. También tengo zapatos altos y grises sobre mis pies, y a pesar de verse algo grandes y con diseño tosco, se sienten más cómodos y livianos de lo que realmente imaginaba.

El Regreso [EN EDICIÓN Y PROGRESO]Where stories live. Discover now