Capítulo XXVII

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Zoe sale cabreada de la biblioteca, yo la persigo a toda prisa. Estela le ha enseñado que Pedri y ella sí estaban hablando... Cuando la detengo por el brazo, se gira hacia mí.

—¡Te dije que tu hermano solo me quería para follar!

—Que no, Zoe. Hazme caso. Estela tiene que haber inventado u omitido algo... Pedri no haría eso.

—Mentirosas. Pedri es como todos los típicos tíos. Yo sabía que iba a hacer eso, y tú me hiciste creer que no —me mira con rabia.

—Estela ha sabotead...

—¡Como os odio a todos!

Se va antes de que pueda decirle nada. Yo vuelvo a casa en un tiempo récord, de haber corrido. Entro y sin pensarlo, tiro la mochila al suelo. Pedri está hablando con Gavi en la cocina, de pie al lado de la barra.

Me acerco a él y antes de que salude, le pego un tortazo en toda la cara. Se soba la parte golpeada, mirándome desorientado. Gavi se aparta un poco, asustado.

—¿¡Tú eres gilipollas!? —hablo.

—¡Relájate! —grita —. ¿¡Se puede saber que cojones te pasa!?

—¡Dijiste que te gustaba Zoe, ¿y ahora vas y haces esto!? —le señalo, enfadada.

—¿El qué?

—¡No te hagas el tonto!

Hago ademán de darle otro tortazo, pero Gavi me detiene y me abraza por detrás, atrapando los brazos.

—¿Se puede saber qué te pasa? —pregunta Gavi, apoyando la cabeza en mi hombro.

—¡Que este subnormal no tiene nada mejor que hacer qu...!

—¡QUE ME EXPLIQUES QUÉ HE HECHO! —interrumpe Pedri.

—¡TÚ LO SABES! ¡Y A MÍ NO ME GRITES!

—NO SÉ NADA, JODER. ¿Qué mierdas has dicho de Zoe antes? ¿Qué le pasa?

—Es que eres un asq...

—Relájate, cariño —murmura Gavi —. ¿Puedes contar qué ha pasado?

—¡Que este idiota se ha follado a mi amiga para después ir a por la otra! —comento, enrabietada.

—¡Qué dices, loca! —Pedri me mira mal.

—¡De que te estabas hablando con Estela! Que si risita aquí, risita allá...

Pedri se queda callado y aumenta mi enfado.

—¡Si es que lo sabía! ¡Los tíos sois unos cerdos!

—¡Que estaba hablando con la chavala esa para que me ayude a pedirle una cita a Zoe! —admite —. Puedo enseñarte el chat y como ella me ponía corazones y yo le contestaba mal.

Ahora la que se queda callada soy yo. Gavi afloja el agarre y miro a Pedri.

—Enséñalo. Y ahora mismito, vas a ir a casa de Zoe, tocar la puerta y enseñarle ese chat —ordeno.

Pedri asiente sin dudarlo y una vez me enseña los mensajes, se va en el coche a donde vive Zoe.

—¡Y tú que sea la última vez que me detienes! ¡El tortazo era merecido por no explicar nada! —me giro hacia Gavi, que da un paso atrás.

—Vale, vale... —murmura, levantando los brazos.

Suspiro y me subo a mi habitación para hacer una tarea rápida de las clases. A la media hora, me llama Zoe.

Descuelgo la llamada enseguida y habla.

—Estela se va a enterar —comenta, enfadada.

Antes de contestarle, descuelga la llamada y a los pocos minutos entra con Pedri a mi habitación.

—¿Qué tienes pensado hacer? —pregunto, levantándome de un salto de la cama.

—Engañarla, vamos a jugar con ella —sonríe Zoe.

Me habla sobre lo que ha pensado de camino a aquí y cuando ve que nos gusta la idea, sonríe aun más.

—Perfecto, pues esta noche la invitamos a una fiesta en alguna casa. Que se presente... —sonríe malévolamente.

Gavi entra a la habitación y saluda a todos. Zoe y Pedri están concentrados en escribir un mensaje para Estela, así que Gavi aprovecha para darme un beso como saludo y asomarse a ver qué escriben.

—¿Por qué no le dais la dirección de un señor mayor que se pelea con todos? Tiene muy malas pulgas —comenta, pasándome el brazo por los hombros.

Zoe y mi hermano lo miran enseguida. Les ha parecido buena idea, porque le preguntan la dirección y la escriben.

Le envían el mensaje y Estela contesta enseguida. Todos sonreímos por la venganza y Zoe apaga el móvil para que no le lleguen mensajes de Estela. Todos hacemos lo mismo.

—¿Os apetece ver una película? —propone Gavi.

—Vale, pero primero, quiero hablar con mi hermano a solas.

Pedri se niega.

—No, no, no —sale rápidamente de la habitación para irse al salón.

—Pues contigo, Zoe —la detengo del brazo y Gavi sale.

—¿Te ha dicho mi hermano de qué hablaba con Estela? —susurro por si me escuchan.

—Sí. Me parece muy cruel que Pedri le dijera eso.

Me quedo extrañada.

—A ver, no liemos las cosas como otras veces. ¿Qué te ha dicho Pedri?

—Que estaba diciéndole a Estela lo mala que es por haberte hecho es...

Me enfado automáticamente, indignadísima.

—Eso no era lo que estaba hablando con ella.

—Pero, Pedri me dijo...

—Pedri te ha mentido —la interrumpo —. Estaba preguntándole para pedirte una cita. Pero, al parecer, Estela le daba información incorrecta.

Zoe se queda paralizada y se pone roja.

—¿En serio? —sonríe un poco.

Yo me rio de su reacción y me da un golpe en el hombro para que me calle.

—Que sí —contesto.

Asiente y decidimos bajar a ver la película que han elegido los chicos. Invitamos a Sira y Ferran, por lo que los esperamos un buen rato. Pero, finalmente, cuando llegan nos ponemos a ver la película todoa juntos.

[...]

TEMPORADA DOS - El mejor amigo de mi hermano ✓Where stories live. Discover now