Amor, Honor y Espadas

Tiempos difíciles

Jessica, Yoona y yo nos marchamos al día siguiente apenas el sol salió, debíamos cruzar el bosque, fue muy difícil para mí despedirme de todos, Yuri, Seohyun, mis compañeros en la guardia, el patriarca y por último Tiffany.

Al final Yoona decidió ir con nosotras, hablo con Seohyun y ella le dijo que iba a esperarla así que quería que volviera pronto.

Yo por mi parte abrace a Tiffany, lo hice con tantas ganas que en un momento no quise separarme de ella, pero mi futuro estaba en algún lugar, uno que no era ese, así que como pude me separé de ella y le dejé un suave beso en la mano, iba a recordar ese beso que nos dimos la tarde anterior.

Le pedí el mayor favor de todos, que cuidara de copo, con él le dejaría una parte de mi y ella lo aceptó, agradecía que lo haya hecho porque así podía marcharme en paz.

Las tres cruzamos la barrera y saqué mi espada, Yoona se agarró de mi camiseta, mientras que Jessica cubría el otro lado, así sería más fácil.

Tardamos un poco en salir del bosque, llegamos a la cabaña con algunos cortes, Yoona nos curó, planeamos entonces que hacer, la idea era que Jessica y yo aparecieramos ante el patriarca, mi hermana pensaba que aún podía haber un poco de humanidad en él y que si era así dejaría que me quedara y volviera a ser una Kim.

Pero si esa idea salía mal entonces Jessica tenía un teletransporte fuera del territorio, uno que llevaba a la capital donde estaba la academia, ella pensó que si las cosas salían mal entonces nos marchariamos juntas, ella dejaría el apellido Kim si era necesario, no quería que algo así le pasara pero si salí del territorio hwang fue para esto, para ir en búsqueda de una vida mucho mejor.

Llegamos en poco a la mansión Kim, nos encontramos con algunos empleados, entonces Jessica me guió hasta mi antigua habitación, busqué un morral para meter algunas prendas y otros implementos que podía necesitar, luego Yoona llego con alguna de sus cosas en un morral también y las dejo con las mías, pasó lo mismo con las cosas de mi hermana.

Una vez listas Yoona se quedó en mi habitación, mientras que Jessica y yo nos dirigíamos donde el patriarca, me cambié porque no quería que nadie se diera cuenta que el territorio hwang me estuvo ayudando, su forma de vestir era la más particular en esta zona.

Jessica ingresó a la oficina del patriarca para hablar primero y luego me hizo entrar a mi, jamas había visto a Rain Kim sorprendido y sí lo estaba, porque claramente no estaba muerta.

Mi hermana lo cuestionó y discutió sobre lo que me había hecho, en un momento llego Hae y todo se volvió más caótico, por un momento pensé que el patriarca cedería pero parece que Hae lo tenía ciego, se había vuelto más que un patán, cuando Jessica le dijo que dejaría la familia Kim conmigo entonces ninguno de los dos dijo nada, parecía que a nadie le importaba, pensé que ese hombre al menos amaba a su hija pero al parecer no es así.

Hae dijo que él era el heredero así que no importaba lo que nosotras hiciéramos, así fue como decidimos marcharnos, tomamos el teletransporte de Jessica no sin antes advertir a mi ex hermano que algún  día pagaría lo que le hizo a Yoona.

Llegamos a la capital, Jessica tenía amistades ahí, tuvimos un lugar donde quedarnos por un tiempo mientras ella iba a hablar con su profesor, mi hermana tardó una semana en volver y cuando lo hizo ese profesor venía con ella.

El nos ofreció hospedaje a las afueras de la ciudad en su casa, ahí iba poder analizar mi situación.

Yoona habló con el profesor sobre el despertar, quería tener maná porque había decidido dedicarse a la medicina y para eso debía tener maná algo que para ella no debía ser tan difícil, aunque si lo fue, porque ella jamás había entrenado ni meditado, así que tardaría.