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~Evora Martin~

Seguí mi día con tranquilidad luego de perder al nuevo chico de vista, tenía un examen de porristas que presentar y debía concentrarme para que un buen resultado.

Así que ya estaba en el gimnasio.

Las chicas que querían entrar al equipo, al igual que yo, ya estaban calentando y sacando a relucir sus mejores trucos para que la capitana nos aceptara en su grupo. Lo único que no me gustaba del equipo es que este era dirigido por la ex novia más detestable que mi mejor amigo había tenido.

Imaginen mi sorpresa al saber que ella ya no era la capitana porque había cedido su lugar a una chica que se trasladó a la escuela tras las vacaciones navideñas.

Realmente creí que eso mejoraría mi día hasta darme cuenta de que la chica nueva era igual, o peor, que Aurora. Esto no podía ser cierto.

—Disculpa. ¿Puedes repetir la coreografía, Lea? —le pedí en nombre de todas las miradas confusas del resto de chicas y ella me vió incrédula —. Creo que no he sido clara, me gustaría que nos repitieras la coreografía —dije más lento para que entienda mejor.

—¿Repetir la coreografía, cielo? ¿Acaso quieres que te tome de la mano y lo hagamos juntas también? ¡Por favor! Si ustedes están aquí esperando que sea tan compasiva como su mami al decirles que todos sus sueños se hagan realidad, la puerta es suficientemente grande para todas —dijo y un par de chicas abandonaron el gimnasio —.
¿Qué, lo harás o llorarás con mami?

—Lo haré, capi. Y voy a demostrarte lo que tengo, te aseguro que no vas a decepcionarte —digo —. ¡Eso es lo que tengo! —jadee cansada al terminar la rutina de acrobacias que llevaba medio mes practicando.

—¿Una audición mediocre? Porque eso es lo que yo ví.

—Wow, y yo que creí que la capitana anterior era una perra, tu te llevas el galardón.

—¿Estas insultandome? —se llevó una mano al pecho teatralmente y yo reprimi una risilla —. ¡Estas fuera! No tendré a una buena para nada en mi equipo que ni siquiera me respeta.

—Al menos no tendré una capitana sin cerebro a la cual soportar —sonreí falsamente y me dirigí a la salida con un par de miradas aprobatorias del resto de chicas que estaban aplicando.

—Ustedes ¿que hacen allí? ¡¿Van a audicionar o se quedarán paradas todo el día?! —alcancé a escuchar antes de salir del gimnasio, ellas continuaron con su rutina —. Tienen que estar bromeando. ¡Eso es un asco!

—Oh, no. Tu eres un asco, vámonos de aquí —dijo alguna chica que supo defender su dignidad.

Me quedé un par de minutos más y pude observar que más de la mitad de las chicas que habían ido a la audición se habían ido tras de mí. Leahnor tenía medio equipo nada más, debía esforzarse si quería seguir siendo un equipo frente al director.

~Clover Levesque~

Como sabrán, soy hermano gemelo del capitán del equipo de voleibol, él es el popular y yo solo soy yo.

Obviamente, me juntaba con sus amigos y el hecho de que mi mejor amiga fuera conocida en la escuela también ayudaba, pero yo no era lo que llamarían chico popular.

No se me daba bien socializar y tampoco es que lo intentara mucho, de hecho los únicos amigos que tenía fuera de mis dos mejores amigos desde la infancia eran los chicos que los ayudaban en el reportaje matutino de la escuela. Pero no me sabía el nombre de la mayoría de ellos porque la única que verdaderamente era amable y genuina conmigo era Chloé White, al menos hasta que la profesora de Español nos asignó el primer trabajo del mes y me tocó con un chico al que conocía de algún lugar que no lograba descubrir.

Am I the one?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora