Am I the one?

8.

~Evora Martin~

Sabía que mi castigo iniciaba hoy, pero no quería parecer desanimada un viernes, después de todo era mi día favorito.

Hice mi desayuno y salí al encuentro de mis mejores amigos, para mi buena suerte Leahnor había enfermado y no asistiría a la escuela, así que no tendría que tolerar su presencia.

El silencio fue reemplazado por la voz del mayor de los gemelos.

—¿Ustedes tienen planes para hoy? —nos pregunta, cuando hace eso es porque él ya tiene una fiesta a la que quiere que asistamos —. Y si no lo tienen ¿quieren ir a una pequeña reunión? Vamos a celebrar el cumpleaños de un compañero del equipo de voleibol.

—¿Vamos? Me suena a que ya nos incluiste en tu plan, hermano.

—¡Así es! Por eso eres el inteligente de nosotros —responde.

—Siento mucho tener que decir que no, tengo que quedarme tras el entrenamiento para lavar sus uniformes y asear el gimnasio —explico —. Digamos que puede que me hayan castigado por haber hecho enfadar a tu novia, pero no importa, son daños colaterales de ponerla en su lugar.

—¿Ahora que hizo? —su voz sonaba cansada y eso me causó gracia.

—No hizo nada que no hubiera hecho antes: aprovechó su rol de capitana y quiso pasar por encima de mí. Pero no fue eso lo que hizo que estallara, fue una charla que tuve con Ezra hace dos días —una sonrisa se formó en mis labios al recordarlo y los gemelos me vieron confundidos —. Ah, es cierto, no lo conocen. Bueno, es un chico de último año que casi siempre está en las canchas o en el gimnasio.

Dicho eso, bajamos del auto.

—¿Como es que no nos habías hablado de este chico? ¿Ahora nos ocultas cosas, nena? —pregunta el único gemelo que usa ese mote conmigo —.  Me decepcionas.

—¡No les oculto cosas, Atlas! Es solo que apenas lo conozco de un par de semanas, pero me cae bien y hemos estado hablando de la vida. Es agradable, seguro que les caería bien —informo —. ¿Sabes que? Si termino rápido mi castigo y me lo encuentro por los pasillos, quizás hasta podrían conocerlo en la fiesta de cumpleaños. Así verán que no les oculto nada.

—Muy bien ¡ya dijiste que sí a la fiesta!

—Ahora yo también iré a la fiesta. Solo para conocerlo...

Claro, si tú lo dices.

—¡No puedo creer lo celosos que son conmigo! Cuando Atlas ha tenido sus "amiguitas" no le he dicho nada. Y bueno, a Clov no puedo objetarle nada.

—Eso es porque ninguna de ellas fue importante, nena —se ríe por su comentario y nosotros lo miramos mal.

—Atlas siendo el mismo idiota de siempre.

—¡Oye!

Atlas y Clover siguen discutiendo entre ellos hasta llegar al salón de estadística que es donde yo me quedaría. Clov se fue a su clase de literatura y Atlas iría a biología. Nos veríamos hasta el almuerzo, así que este sería un día largo.

~×~

~Clover Levesque~

Fui directo al salón L-9 que era donde se impartía la clase de Literatura, una de mis materias favoritas a pesar de destacar en el área numérica.

Odiaba ser impuntual, así que trataba de apresurar a mi hermano cada vez que tenía que venir al instituto, pero casi siempre llegábamos tarde gracias a nuestra mejor amiga y hoy no había sido diferente.