vingt.

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Hwang está sentado en mi piso. Arroja sus botas a través de mi cuarto, y golpean en mi puerta con un ruidoso smack. Es el primer ruido que cualquiera de los dos ha hecho desde que vinimos aquí.

— Lo siento. — está avergonzado. — ¿Dónde debería ponerlas?

Pero antes de que pueda responder, vuelve a hablar.

— Karina piensa que debería ir a Seúl. Casi compré el boleto de avión muchas veces, pero no es lo que mamá querría. Si mi papá no lo quiere, ella no lo quiere. Pondría mucho estrés en la situación. — estoy sorprendido por las palabras repentinas.

— Algunas veces me pregunto si ella, Karina, si ella, tu sabes... — su voz disminuye. — Me quiere fuera.

Él nunca habla de su novia. ¿Por qué ahora? No puedo creer que la tenga que defender. Alineo sus botas al lado de la puerta para evitar mirarlo.

— Ella probablemente está simplemente cansada de verte miserable. Como todos nosotros. — añado. — Estoy seguro... estoy seguro que está loca por ti como nunca.

— Hmm. — me ve arreglando mis zapatos y vaciando el contenido de mis bolsillos. — ¿Qué hay de ti? — pregunta después de un minuto.

— ¿Qué hay de mi?

Hwang examina su reloj. — El chico mullet. Lo vas a ver el próximo mes.

Las cosas con él están extrañas. Está restableciendo... ¿Qué? ¿La línea divisora? ¿La que ha quitado y tengo que hablar de ello? Pero sinceramente no quiero hablarle de ello. No en realidad. Pero no puedo decir esto después de que mencionó a Karina.

— Sí. No puedo esperar a verlo. Es un chico gracioso, te gustaría. Voy a ver a su banda tocar en Navidad. Yeonjun es un chico genial, te gustaría. Oh. Ya dije eso ¿verdad? Pero te gustaría. Es muy... divertido.

Cállate, Jeongin. Cá. Lla. Te.

Hwang abrocha y desabrocha la banda de su reloj.

— Estoy agotado. — digo. Y es la verdad. Como siempre, nuestras conversaciones me exhaustan. Me meto dentro de la cama y me pregunto qué va a hacer. ¿Yacer en el piso? ¿Volver a su cuarto? Pero coloca su reloj en el escritorio y sube a mi cama. Se desliza a mi lado. Él está arriba de las cobijas y yo debajo. Todavía estamos vestidos completamente, excepto por nuestros zapatos, y toda la situación va más allá de incomoda.

Él se levanta. Estoy seguro de que se va a ir, y no sé si estar aliviado o decepcionado, pero... él apaga la luz. Mi cuarto está a oscuras. Se arrastra de nuevo a mi cama y se golpea contra la esquina de la misma.

— Auch.— dice.

— Hey, hay una cama ahí.

— Gracias por la advertencia.

— No hay problema.

— Me estoy congelando aquí. ¿Tienes un ventilador o algo?

— Es el viento. Mi ventana no se cierra. Tengo una toalla debajo de ella pero no es de mucha ayuda.

Él encuentra su camino de vuelta a la cama y se desliza en ella. — Uhmmm...— dice.

— ¿Si?

— Mi cinturón. Sería raro si...

Estoy agradecido de que no pueda ver mi rubor.

— Por supuesto que no. — y escucho es golpe del cuero cuando se lo quita. Lo pone suavemente en el piso de madera.

— Uhm. — dice. — ¿Y sería raro si-...

— Sí.

— Oh, no no no. No estoy hablando de pantalones. Solo quiero estar debajo de las mantas. Esta brisa es horrible.

Se desliza por debajo, y ahora estamos yaciendo uno al lado del otro. Y mi pequeña cama. Divertido, pero nunca imaginé que mi primera vez en la cama con un chico nos limitaríamos a dormir.

— Ahora lo único que necesitamos son Dieciséis Velas y un juego de Verdad o Reto.

Él tose. — ¿Qu-Qué?

— La película, pervertido. Solo estaba pensando que desde hace tiempo no tengo una pijamada.

Una pausa. — Oh.

— ...

— ...

— ¿Hwang?

— ¿Si?

— Tu codo está apuñalando mi espalda.

— Mierda. Lo siento. — él se mueve, y luego se mueve otra vez, hasta que estamos cómodos. Una de sus piernas descansa contra la mía. A pesar de las dos capas de mantas entre nosotros, me siento desnudo y vulnerable. Se mueve otra vez y ahora mi pierna entera, de la pantorrilla al muslo, se apoya contra la suya. Huelo su cabello. Mmm.

¡NO!

Yo trago, y es muy ruidoso. Tose otra vez. Trato de no retorcerme. Después de lo que se sintieron como horas pero seguramente fueron segundos, su respiración disminuye y su cuerpo se relaja. Finalmente me empiezo a relajar, también. Quiero memorizar su aroma, el toque de su piel (uno de sus brazos, ahora está recargado en el mío) y la solidez de su cuerpo. No importa lo que pase. Recordaré esto por el resto de mi vida.

Estudio su perfil. Sus labios, su nariz, sus pestañas. Es tan hermoso.

El viento sacude los cristales, y las luces zumban suavemente en el pasillo. Duerme profundamente. ¿Cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que ha tenido un descanso decente? Hay otro tirón incómodo en mi corazón. ¿Por qué me preocupo tanto por este chico?, y ¿por qué me gustaría que no? ¿Cómo puede una persona hacerme sentir tan confundido todo el tiempo?

¿Qué es eso? ¿Es karma? ¿Y es incluso posible para mí sentirme de esta forma sobre él sin que estos sentimientos sean correspondidos? Él dijo que le gustaba. Lo dijo. E incluso si estaba borracho, no diría eso son que hubiera algo de verdad en ello. ¿Verdad?

No lo sé.

Como todo el tiempo que estoy con él, no sé nada. Él se acerca más a mí mientras duerme. Su aliento es cálido y choca en contra de mi cuello. No sé nada.

Es tan hermoso, tan perfecto. Me pregunto si él... si yo...

(...)

Un rayo de luz entra en mis ojos, y los entrecierro, desorientada. La luz del día. Los números rojos en mi reloj marcan las 11:27 a.m. Huh. ¿Cuánto tiempo dormí? ¿Qué día es hoy? Y luego veo el cuerpo en la cama junto a mí. Y estuve a punto de saltar fuera de mi piel.

Así que no fue un sueño.

Mierda santa. Dormí con Hwang.

quién pudiera HAJWHSJS

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quién pudiera HAJWHSJS

si pudieran irse de intercambio
a algún lugar del mundo ¿cuál sería?

yo a Londres, amo demasiado ese
lugar, o al menos los estereotipos HAJSHSJ

☁︎ the french kiss ; hyunin.Where stories live. Discover now