MI CORAZÓN DE CRISTAL

Capítulo 6: La chica del bikini azul

Cogí mi mochila que había traído y metí mi bañador, crema solar y agua.

— Hijo, ¿a dónde te vas a ir?— preguntó mamá cuando pasó por mi habitación y me vio.

— Voy a salir con los vecinos a la playa, dijeron algo de hacer un camping. — cerré la mochila y me la colgué al hombro.

— Me alegro de que te lleves muy bien con ellos.— me dio un beso en la frente — Cuídate.

Si ella supiera...

Me despedí de papá y de la abuela antes de salir de casa.

Me reuní con ellos en la casa azul, donde había aparcado dos Jeeps a fuera del garaje.

— Hasta llega tarde.— Aida se dio la vuelta para ignorame.

— Oye, he llegado pronto.— me defendí.

— Ya estamos todos.— Olivia corrió a abrazarme y me sonrojé otra vez.

— Uy uy,el vecino está coladito por nuestra Olivi.— sonrió de manera pervertida Robin y me sonrojé todavía más.

Olivia se rió al igual que Peter, mientras que a los demás no les hacía gracia.

Aidan se subió al primer Jeep y se marchó con sus amigos.

—¿Ahora quién va a conducir si ya no hay mayores?— me extrañé.

— ¿Pues quién va a ser?— Aida cogió las llaves del segundo auto y tomó el volante.

— Esto es una broma, ¿no?

Seguí parado ahí, si me subía seguramente estamparía el coche contra la primera farola que viese para matarme.

—¿Qué?— sonrió con maldad —¿Me tienes miedo?

— Claro que no.

Me subí con los gemelos a los asientos de atrás y Olivia en el asiento del copiloto. Y Ethan nos siguió en su motocicleta.

La playa no estaba muy lejos, pero andando habríamos tardado más.

Aparcó el Jeep al lado del otro, pero no vimos rastro de Aidan y sus amigos. Ya estarán en la playa.

Yo ayudé a cargar la sombrilla y con ayuda de los gemelos lo clavemos en la arena mientras las chicas se habían ido a cambiarse junto con Ethan.

—¿Qué tal te caen los demás de nuestros amigos?— me preguntó Peter — No vale Olivia.

— Que todo el mundo aquí sabe qué está pasando.— se rió Robin.

— B-bueno. — tartamudeé por el rubor — Ethan no lo conozco mucho y Aida es de lo peor.

— Jajaja... — se rieron los dos a la vez — Aida sólo se comporta amable con la gente que le cae bien.

— Pues entonces me has dicho que yo le caigo mal.

— No nos lo ha dicho pero seguramente será por eso.— se calló de golpe Robin y vimos que los tres ya habían vuelto.

Ethan estaba muy fuerte e iba con un bañador negro. Aida se había puesto un bikini azul todo liso y la más sorprendente, Olivia. Traía puesto un bikini blanco con rayas negras como el patrón de una cebra.

— Uy uy uy, ¿a dónde van estas dos solteras así de preciosas?— alabó Robin.

— Díganme que yo sí soy lo suficientemente atractivo como para salir con vos.— Peter le dio la mano a Aida y luego a Olivia — O con vos.

Ethan se rió de lo que hizo su amigo al igual que Olivia, mientras que la morena seguía igual de tiesa como una piedra.

Esta vez nos tocó a nosotros tres irnos a cambiarnos.