MI CORAZÓN DE CRISTAL

Capítulo 16: Blow

Se habían acabado todas las clases de la mañana y el patio.

Tocaba educación física y la profesora dijo que haríamos prueba física. Había que correr 10 minutos hoy y en las próximas clases iría aumentando el tiempo.

Antes de empezar a correr quise ir al vestuario a dejar mi mochila y atarme bien los cordones. Lo que no me esperaba es que estuvieran allí también Ethan y Aidan.

— Ethan, ¿tú no deberías de estar en el gimnasio?— pregunté.

— Sí, pero antes déjame decirte una cosa.— dirigió todo su puño contra todo mi pecho y caí al suelo — Aida es mi novia y nadie más va a salir con ella a solas, y menos tú.

— No creas que no os vi.— se rió Aidan — Hasta yo fui el ladrón de su bolso. Nadie sale con mi hermana a menos que sea mi amigo y menos un pobre como tú.

Me cogió de la cabeza y me estampó contra una taquilla.

—¡¿Me has entendido?!— el grandullón alzó la voz.

Asentí con la cabeza y los dos me dejaron a solas. Me temblaba el cuerpo,no pude levantarme hasta después de un tiempo.

Me miré en el espejo, por lo menos estas heridas eran menos graves. Sólo me sangraba la nariz y tenía un chichón gigante en la frente.

Abrí el grifo para lavarme la cara e iba a enfermería a por hielo. Pero la puerta del vestuario de chicas estaba abierto y encima a oscuras.

Eché un ojo adentro, como no vi a nadie iba a cerrar la puerta. Pero por el reflejo del espejo vi a una chica, Aida.

Sacó una pequeña caja de la mochila y la abrió. Eran pequeñas pastillas blancas, ¿eso era droga?

Se tomó una y salió corriendo del vestuario para unirse a la prueba junto con los demás. ¿Se había drogado sólo para aguantar la prueba de resistencia? Quedé muy frustrado y mi furia estaba hirviendo.

Estaba harto de esta gente que hacía lo que le daba la gana como si estuvieran en sus casas y utilizasen a Olivia para sus problemas.

Ignoré la clase de educación física y saqué mi móvil. Tenía fotos de Aidan fumando marihuana y bebiendo alcohol con su grupo. El vídeo de él quemando la papelera y el vídeo de hoy donde Aida le robaba dinero a un pobre niño.

Subí todas las pruebas a todas las aplicaciones que tenía bajo una cuenta falsa.

Dejé el móvil y corrí al gimnasio. Ya se había terminado la clase y fingí que también había corrido con ellos.

Todos se fueron a los vestuarios y cogieron el móvil porque no paraban de recibir notificaciones. Yo había apagado el mío porque si no iba a recibir muchos más que ellos y sería sospechoso.

— Alguien ha pillado a los hermanos Millers.— se rió Riley abrazando a Noah.

— El karma llegó pronto.— se burló Liam.

Los que estaban en el vestuario de chicos empezaron a murmurear un montón de cosas y seguro que en el de chicas también.

—¡Callaros de una puta vez!— Ethan golpeó la taquilla — Como el vídeo llegue al director os parto la cara.

— Si somos más que tú, no te tenemos miedo.— le sacó la lengua Zoe.

— Díselo.— Liam se rió.

Los gemelos no dijeron nada, sólo se quedaron petrificados mirando los vídeos y las fotos.

— Están en graves problemas.— Robin se llevó las manos a la cabeza preocupado.

Las amigas Riley y Zoe salieron de nuestro vestuario para irse al de chicas.

Aida había salido corriendo porque las chicas no le paraban de insultar.

Las dos amigas la cogieron de la ropa y la empujaron contra el suelo.

— Qué raro verte así de indefensa.— Riley la cogió del pelo.

— Qué pringada que eres.— Zoe le pisó la cabeza.

— Ethan Adams y Aida Morgan, a dirección.— llegó la secretaria junto con Aidan.

El peliblanco y la morena se fueron a dirección.

Yo me asomé al vestuario de chicas y vi a Olivia muy asustada sentada en la esquina.

— Ven.— la llamé.

Ella salió y yo la abracé para consolarla.

— Tranquila, todo ya se acabó.— le susurré para calmarla — Tú no tienes la culpa, son tus amigos.

Ella escondió su cara en mi hombro y me abrazó.

En todas las redes no paraban de salir lo que publiqué y seguramente pronto llegará a oídos de los padres de los hermanos.

Mi venganza ya estaba hecha y ya había rescatado a Olivia. Era el fin de los Millers.