Jodidos Alfas

No son un juego, España

España dejo el cuello del ruso para subir a sus labio dejando camino de besos y poder volver a probar sus labios a lo que el ruso no se opuso ni un momento a los labios del español. España mordió el labio del eslavo haciendo abrir la boca en un gemido lo cual aprovecho el ibérico para poder profundizarlo más.  España se acomodo sobre el regazo del ruso mientras que este solo agarro fuertemente el trasero del ibérico mientras lo empujaba hacia él.  Ambos separaron en busca de oxígeno, mientras abrían sus ojos y se miraban fijamente.

Rusia: España...- susurro en un suspiro mirando al ibérico.- Mejor lo dejamos aquí, no creo poder controlarme si seguimos.

España sonrío de manera ladina y empezó a mover por si solo las caderas, soltando leves suspiros e incitando al ruso a seguir. España se acerco a él dándole un rápido beso en los labios.

España: Note controles...- le susurro.

Rusia en un movimiento rápido tumbo al español sobre la cama, este reía divertido y mirando al ruso tiro de sus brazos haciendo que perdiera el equilibrio y de un rápido movimiento fuese el eslavo quien estuviese tumbado en la cama. Rusia estaba confundido mientras el español reía sobre el, sentado sobre su vientre como un pequeño duende travieso.

Rusia: ¿Cómo?- pregunto confundido.

España: Más vale maña que fuerza- dijo con una sonrisa. El ibérico empezó a descender lentamente y tumbarse sobre el pecho del ruso, dándole otro pequeño beso susurro sobre sus labios- Que seas el alfa no significa que todo será como tú quieras, Rusia. Es algo que debes de asumir si quieres estar conmigo.

España empezó a besar y morder levemente los labios del contrario mientras reía divertido, Rusia solo se dejo hacer mientras acariciaba la espalda de su español. España empezó a bajar los besos hasta volver adonde había dejado su marca en el hombro del ruso, dando pequeños mordiscos y besos. Rusia gruñía de dolor y molestia pero no lo apartaba o decía nada, solo le acariciaba la espalda. España creyendo que ya le había torturado bastante siguió bajando su camino de besos llevando sus manos a los enormes pectorales del ruso agarrándolo tan fuerte y amasándolo al ritmo que el contrario lo hacia con su trasero. Rusia soltó un fuerte sus piro y cerro los ojos disfrutando de los labios del omega, España se quedo tranquilo sobre el pecho del ruso besando y lamiendo los pezones de este, le hacia curioso ver unos pezones tan rositas, pero claro, el ruso era albino después de todo aunque no quitaba que de cierta manera le hacia gracia que lo único que tenía de color el contrario fuese únicamente sus ojos y los pezones, el resto era tan blanco como la nieve virgen. España se levanto levemente y ensancho su sonrisa al ver como en los sitios donde había besado parecían pequeños moratones lilas.

Rusia: ¿Qué pasa?- pregunto confundido entreabriendo los ojos.

España: Nada... solo que me hace gracia ver como aquello que beso deja marca.- dijo mientras volvía a tumbarse.

Rusia: Es normal.. mi piel es sensible, hasta el más mínimo golpe me deja un moretón por meses incluso.- dijo volviendo a  cerrar sus ojos al sentir al omega otra vez contra su pecho.

España: ¿Te hago daño?- pregunto algo preocupado, vale que le gustara mostrar su dominio, pero no quería lastimar a alguien de verdad.

Rusia: No... tranquilo, me gusta. Sigue- pidió acariciando la espalda del español por su columna. España al arqueo soltando un suspiro . Rusia lo acerco a él y lo beso lentamente- Sigue- pidió tras romper el beso.

España solo sonrió y bajo de nuevo besando el pecho del ruso mientras este acariciaba sus muslos y soltaba suspiros. 

De repente sintieron la puerta ser llamada de nuevo, Rusia gruño molesto.