Capítulo 5

330 33 2
                                    

Querido Alexandre,

Siento mucho decirte que este fin de semana no podré ir a tu casa. Aunque me mata no poder verte, Remus y Sirius han insistido en que deberíamos estudiar juntos. Lo veo normal, ya que tenemos los exámenes a la vuelta de la esquina. Así que espero que puedas pasar bien estos días. Te prometo que el jueves, en cuanto acabe mi último examen, me escaparé para verte, y estaremos juntos hasta el siguiente lunes.

Siempre tuyo, James.

PD: Ves pensando dónde nos mudaremos cuando me gradué.

PD 2: No te puedes ni imaginar lo caliente que me pongo cuando recuerdo tu voz hablando francés, la podríamos contemplar como opción ¿no crees?

Regulus dejó la carta en la encimera y caminó a paso lento hasta la habitación. Lo cierto era que esos días se le harían horriblemente largos. Aunque al principio con el miedo que sentía no se había dado cuenta, pero la soledad lo estaba consumiendo. Pensó en Karcher, y que podía pedirle a Sirius que lo liberara y lo trajera con él. Pero mientras su madre y su padre siguieran con vida, Karcher no era de confianza.

Se sentó en la cama y miró la mesilla de noche, la abrió y suspiró sacando el pequeño joyero que había hechizado para que se convirtiera en un contenedor que no dejara salir la magia. Rozó la tapa con la varita y la hizo transparente, dejando ver el relicario de Salazar que había dentro. Eso sería lo que lo mataría, sabía lo que el señor oscuro había hecho con él, en lo que lo había convertido y lo que ahora valía. Si fuera tan confiado como el grupo de su novio, se lo entregaría a Dumbledore y dejaría que este se hiciera cargo. Pero sospechaba que el viejo ocultaba los mismos o más secretos que el señor oscuro.

Por el momento, lo seguirá ocultando en ese joyero, que había convertido en una pequeña caja fuerte. Él averiguaría cómo destruirlo y lo haría. La volvió a guardar y se tumbó en la cama con los ojos cerrados, no sabía cómo rellenar esos días sin James. Y eso le preocupaba, no quería depender de su novio, pero su situación tampoco era la mejor.

Se levantó un momento y puso el cassette que había comprado volviéndose a tumbar, el silencio de su apartamento se llenó con las voces de los diferentes miembros de la banda. Movía sus pies y manos a ritmo de la música, sintiéndose menos solo. Un peso en su abdomen hizo que se enderezara asustado. Miró el búho oscuro, que le devolvía la mirada curioso mientras dejaba una carta a su lado. La tomó mientras abría la cajita de las chuches para lechuzas con la varita.

Leyó rápidamente esto antes de fruncir el ceño, quizás no debería haberla abierto. Sirius le había escrito para decirle que Walburga se había puesto en contacto con él, para devolverle un sitio en la familia, sobre todo ahora que él estaba muerto. ¿Le sorprendió que su madre lo hubiera olvidado tan rápido? No para nada ¿Le dolía? Sí, siempre había sido el hijo perfecto, el que no le había dado dolores de cabeza a su madre, o él que seguía las normas. Y solo había necesitado unas semanas para olvidarse de él.

No le envió respuesta, Sirius contestaría mejor de lo que él pudiera hacerlo.

∽**∽

Potter entró en la biblioteca mientras maldecía a sus dos mejores amigos. No solo lo había obligado a quedarse con ellos, sino que iban a llegar tarde por estar follando en el baño. Se sentó en una mesa vacía y abrió un libro para comenzar a leer. Una presencia oscura hizo que frunciera el ceño, levantando la mirada y viendo a Severus sentado enfrente de él, con el pelo detrás de las orejas y mirando alrededor nervioso.

- Pasa algo con Regulus.- Dijo mirando serio al gryffindor que se tensó más.- El señor oscuro está nervioso, solamente exige hablar con las personas cercanas a este.- Dijo viendo como James frunció su ceño molesto.

Whispers and Dreams (Jegulus)Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum