28. ¡¿Qué dijo?!

1K 137 21
                                    

Narra Tahiel:

Acabamos con el aquelarre del norte, pero muchos de los nuestros perdieron la vida. Nos habíamos estado preparando pero su ataque fue repentino, y eso actuó a su favor.

Papá, Santi, y yo nos estamos encargando de evaluar los daños, junto a una gran parte de los hombres del reino que están ayudando con los cadáveres.

Ela me pidió que encontrara el cuerpo de una niña que al parecer conoció ayer. Me dolió ver lo mucho que le afecto la muerte de esa pequeña. Y duele ver que alrededor de diez niños menores de once años perdieron la vida.

Pero reconforta saber que todos los atacantes están muertos, y que el aquelarre de mi madre irá a terminar lo que ellos empezaron.

Se dice que en la guerra no hay bueno ni malo, porque ambos bandos luchan por lo que creen correcto, pero en esta ocasión me tocará ser el villano. Porque todo ese aquelarre tiene inculcada la creencia de que somos monstruos, y ahora tienen más que motivos para crecer con la sed de venganza hacia nosotros.

Esto es solo una de las difíciles decisiones que debo tomar como rey, por el bienestar de mi reino, y de mi familia.

-Señor, creo que encontramos a la niña - sigo al soldado hasta llegar junto a una pequeña de no más de ocho años, por el estado de su cuerpo no puedo ver lo que Ela vió, pero sé que es ella.

- Llévala a preparar, la reina quiere verla antes de la sepultura - decido ir a darle la noticia yo mismo, quiero estar junto a ella en ese momento.

Llego pero no la veo en ningún lado y nadie la ha visto.

¿Todavía está en la cama?

Sonrío.

Subo rápidamente los escalones y avanzo con dirección a nuestro cuarto.

Pero todo mi cuerpo se paraliza cuando escucho lo que Leticia acaba de decir.

-¡Voy ha ser tía! - grita emocionada

¡¿Qué dijo?!

Abro la puerta encontrándome con ellas abrazadas, rompen el abrazo sonrientes percatándose de mi presencia.

-¿Vas ha ser tía? - es lo único que sale de mi boca.

¿Eso significa..?.

Ela me agarra las manos y una enorme sonrisa ilumina su rostro.

-No es cien porciento seguro, pero hace un tiempo que siento una energía diferente emanar de mí, algunos malestares y el dato más verídico, un retraso - escucho todo en silencio.

No sé de esas cosas pero creo que todo eso lo provocan los embarazos.

¿De verdad voy a tener un bebé?

Una miniatura peli blanco, lo siento pero nuestra genética es bastante dominante, siempre tendrán pelo blanco, sus ojos pueden variar, pero el primogénito siempre tendrá pelo blanco y ojos ámbar, eso es lo que lo denomina como sucesor.

- Te juro que quiero gritar a todo pulmón que seré papá - la emoción es más que notable en mi voz  - iremos al hospital ahora mismo para verificarlo.

Salgo de la habitación con ella de mano  y con Leti detrás.

Llegamos al auto y Ela se acomoda, Leti intenta entrar pero la detengo.

-Lo siento Leticia. Dos es compañía, tres es multitud - subo al auto aprovechando su shock y arranco.

Ella grita algo pero no le presto atención.

-¿Por qué dejaste a Leti? - Ela me mira con los ojos entrecerrados.

Ups.

-Ahm, bueno es que... - pienso una respuesta pero nada llega a mi
mente - eh..es que yo quiero compartir este momento solo contigo, sé que es egoísta pero quiero que en el momento en el que nos den la noticia solo lo célebres conmigo. Que no tengas que compartir tu emoción con nadie más - hablo con la vista al frente.

HíbridosWhere stories live. Discover now