[4] CCC_Viraha | TERMINADA | ©

Capítulo 47

Más tarde, Fiorella se dedicó a hacer limpieza en la cocina, al mismo tiempo que acompañaba a Colec a preparar la cena. Por otro lado, yo estuve recogiendo la ropa que iba a lavar y Lía está en el estudio.

Me dirigí al patio de la cocina, donde está la lavadora y la encendí como era debido. Fiorella ya me había dicho que no tenía problema en ayudarme con mi ropa, e igual lo rechacé, pues ya era demasiado y de hecho yo debí haberme ofrecido a hacerlo con la suya.

—Ve por Lía —me indicó Colec, puesto que la cena ya se encuentra lista.

Dejé la lavadora trabajando y encaminé al estudio.

Bajé con cuidado, haciendo lo posible por no hacer que la madera bajo mis pies crujiera. Abrí la puerta y asomé la cabeza, solo que no vi a nadie.

Iba a subir de vuelta, entonces vi el lienzo que Lía estaba trabajando frente a la ventana, la pintura de un colibrí.

Parece que ya está terminado.

—¿Me estás espiando? —preguntó Lía detrás de mí. Hizo que mi corazón se acelerara por culpa del susto, algo que la chica pasó de largo e ingresó.

—No —dije y me acerqué a la pintura—. ¿Tú hiciste eso?

—Sí, ¿qué te parece? —situó ambas manos en su cadera y ladeó la cabeza.

—Se ve triste —murmuré.

—Igual que muchos —sentí que me miró por el rabillo del ojo, pero no me detuve en eso.

El ave tiene distintos colores, tanto en el cuerpo como en las alas, cuyo interior está teñido con la mezcla que consiguió imitando mi tono de piel.

—¿Porque le...?

No me permitió terminar mi pregunta, me dio un beso al instante en que me giré, uno que apenas me dio oportunidad de advertir, ya que enseguida se apartó.

Se humedeció los labios y me miró con miedo.

—Perdón, es que a veces siento que me vas a dar una cachetada —se explicó con rapidez.

Me reí.

—No voy a hacer eso.

Enserié, me acerqué a ella, le recogí el cabello detrás de la ojera y la volví a besar. Quería un beso más completo, aun si no me hubiera dejado satisfecha.

Estaba a los pies de Lía. Cada aspecto, gesto, palabra y respiración suya los deseaba únicamente para mí. No pretendía compartirla con nadie.

Posterior a la cena, Fiorella y Colec me pidieron esperar en la sala mientras Lía terminaba de guardar sus cosas en el estudio.

Desde que me dijeron que tenían que hablar conmigo, supuse que no era nada bueno; no se han deshecho del mosqueo en la expresión y me están poniendo nerviosa.

Tomé asiento en el sofá individual.

—No sé qué te haya dicho Logan, pero las cosas en ILIA están muy mal —comenzó Colec—, me preocupa que Alicia se desespere y venga por ti.

—Nuestra intención era que estuvieras aquí en lo que todo se calmaba y, en su lugar, está empeorando —aseguró Fiorella.

Lo pensé con la correcta seriedad, porque la verdad solo le estaba dando vueltas a todo eso sin llegar a ninguna resolución.

Lo que le haya hecho a Alexey y el asunto con Mijaíl, no necesariamente sigue siendo lo más importante, sino lo que está pasando con ILIA y, si Alicia está involucrada, tengo que hacer algo antes de que Logan, Marina, Olive, Jimena y Kaede resulten afectados. No es como que desee que algo les suceda.