Lovesick Girls [BeckFreen]

24

Había pasado ya media hora desde que
estaba lloviendo, Becky y Freen estaban en una esquina de la casa buscando que la lluvia no les cayera, la pelinegra estaba detrás de Becky y ella daba leves caricias a su mano, tratando de calmarla mientras vigilaba que nadie viniera, ya era de noche y en una calle poca transitada podría ser peligroso.

Un trueno nuevamente se escuchó y Freen apoyó su cabeza en la espalda de Becky, aún sentía demasiado miedo, era algo que no podría controlar.

—Ya...ya está pasando - avisó Becky después de diez minutos más, poco a poco la lluvia comenzaba a parar.

Gotas de lluvia caían por su mentón y su
cuerpo temblaba ligeramente por el frío, su
ropa estaba empapada y su cabello se pegaba a su rostro mojado.

—¿Segura? -Freen levantaba la mirando, no soltaba la mano de Freen.

La pelinegra solo tenía parte de su cabello algo húmedo, gracias a qué Becky la cubría y que era ella quien tenía la silla de plástico sobre la cabeza.

Ven - la guío con cuidado a la puerta, temía
que resbalara - espérame aquí, ¿Sí?

—T-trataré de entrar por arriba y t-te abriré - temblaba.

En otra situación Freen se hubiera burlado
que la casa de Becky no tuviera ventana, pero ahora solo deseaba estar dentro y sentirse protegida.

Freen asintió y soltando su mano, Becky se
acercó nuevamente a un extremo junto a la
silla, la acomodó para poder subir cuando
escuchó el llamado de Freen.

—Becky... -la pelinegra retrocedió con temor, la castaña siguió su visión y un hombre parado en medio de la autopista la mirada, estaba igual de empapado y su ropa estaba sucia y rota, pero lo que hizo que Becky vuelva al lado de Freen y volviera a ponerse frente a ella en modo de protección, era el cuchillo que el hombre sostenía en una de sus manos.

—Tranquila...- volvió a tomar su mano - se va a ir.- susurró.

El hombre dió un paso adelante, seguido de
otra y fue avanzando lentamente a ellas, Becky estaba nerviosa, también tenía miedo, pero debía cuidar a Freen.

El hombre se detuvo frente a ellas y Becky no bajó la mirada, mirándolo fijamente.

—El dinero - pronunció - denme el dinero que tengan.

—No tenemos dinero - respondió Becky.

—Mienten - observó a Freen y ella se escondió aún más detrás de Freen - reconozco una fina ropa como los que está usando ella, denme el dinero - apretó el cuchillo.

—Ya le dije - respondió nuevamente Becky - no tenemos dinero.

—¡Que me den el maldito dinero!

Becky aprovechó su enfado para irse contra él y golpearlo de inmediato, Freen gritó del susto al ver cómo ambos caían y el hombro la hizo girar y levantó el cuchillo para atacar a Becky, la castaña sostuvo su brazo con ambas manos en el momento justo.

Pero la energía se le estaba yendo, el tipo era mucho más fuerte.

Freen, así sea asustada, corrió y le propinó
"fuertes" golpes en la espalda del hombre.

—¡Déjela! ¡Déjela! - lo golpeana por todas
partes - ¡Déjela! - notó que su ayuda no estaba dando resultado y que Becky estaba perdiendo fuerza, e hizo la primera idea que se le ocurrió.

Becky vió absorta como Freen corría lejos sin ayudarla.

—¡HIJA DE P...- detuvo su hablar cuando notó que Freen regresaba corriendo con una piedra en sus manos.