Lovesick Girls [BeckFreen]

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Los amigos se encontraban en un campo libre dónde los niños podrían jugar, aunque no el pequeño Tae (hijo de Nam y Baitoey) él apenas y estaba aprendiendo a caminar pero le encantaba seguir a Emma mientras sostenía la mano de la pelinegra.

Emma no se quedaba atrás, corría siguiendo a Heng en una guerra de nieve, el mayor tenía cuidado porque era más pequeña, pero ambos se divertían al escuchar la risa tan adorable de Tae.

-¿Ustedes van a adoptar? - preguntó Noey a su hermano, todos los mayores estaban sentado en un círculo conversando, sostenian en sus manos una taza de chocolate caliente que Irin había traído.

-Despues de la boda - Mew sostuvo la mano
de Gulf - adoptaremos a tres - sonrieron.

-¡¿Tres?! - pronunciaron todas juntas.

-¡Yo apenas puedo con una! - respondió Noey señalando sus ojeras y su cabello atado como sea.

-Pero si Irinse ve perfecta - señaló Gulf.

La pelinaranja estaba radiante, no se podía
negar.

-¡Ella para todo el día en el taller! ¡Solo
está cuando Emma no llora o no hace sus
berrinches! - se quejó Noey.

-Tengo que llevar el dinero a casa, cariño -
respondió Irin tomando de su chocolate.

Sus amigos evitaron reírse al ver la expresión de Noey, que escusa más tonta era para la rubia, sabiendo que ambas tenían mucho dinero que ninguna necesitaba trabajar.

-Vuelves a decir eso y te juro que-

-Ya, cariño - Irin la atrajo en un abrazo -
estás muy estresada - apretó sus mejillas,
Noey sentía que iba a explotar - mira, para
que te relajes un poquito, yo la cuida esta
semana y tú sales a divertirte.

-¿En serio? - sonrió ilusionada.

-Claro, amor, no creo que sea tanto problema en cuidar a mi hija, mírala - vieron a Emma jugar con la nieve - es tan adorable.

-Trato - respondió Noey de inmediato.

-Ma...- Emma se acercó sujetando su pequeño
trasero.

-Oh, no - Noey la giró para que se dirigiera a
Irin - dile a tu mami, cariño.

-¿Qué quiere mi niña? - la pelinaranja se
inclinó hacia ella.

-Cambio -comentó en voz baja.

Noey sonrió con malicia al ver la expresión
asustada de Irin cuando logró comprender.

-Cariño...

-Oh no no no - Noeh la interrumpió - tú dijiste, ahora cámbiale - le dió la espalda.

Irin suspiró resignada y cargando a su hija,
se la llevó junto a la pañalera directo al auto aparcado.

-¿Seguros que quieren tres hijos? - preguntó
Becky al lado de Freen - es grandioso el amor que nos hacen sentir, pero también es una responsabilidad muy grande, tener hijos no es nada fácil.

-Lo sabemos - respondió Mew - pero tenemos todo lo necesario, tenemos amor, estabilidad económica, un gran hogar y sus estudios no serán problema.

-Además, siempre hemos pensado en los que tienen hermanos - agregó Gulf - es mejor adoptarlos antes que sean separados, ¿No creen? Por eso decimos tres, por si son tres hermanos que lo necesitan.

-¿Y si son cuatro?- preguntó Freen.

-Los adoptamos igual - asintió Mew.

-¿Y si son cinco?- preguntó Nam recostada, su pequeño hijo le cubría el cuello con nieve y reía junto a Baitoey.