Forty-one

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Forty-one;
— Sentirse como campanita. —

━━ Me duele todo.

Rubius se quejaba en voz baja. Estaba apoyado en una de las paredes del local, una de sus manos cubría su rostro impidiendo que las personas que miraban la escena aterrorizados pudieran verlo con tantos moretones y sangre.

━━ Ya estoy llamando a Wilson.

━━ ¡Pues apresurate qué parezco un maldito animal de zoológico, joder! ━━ Rubius estaba alterado, enojado. ¿Quién demonios se había atravido a dejarlo de tal forma? ¡Nunca nadie antes se había atrevido siquiera a tocarlo!

━━ ¡No me grites! ━━ Los gritos ponían nervioso al de ojos carmín. Sacó su celular y marcó a su fiel ayudante, otro de los involucrados en éste complejo plan. ━━ Wilson, ven ahora. ━━

Mientras su amigo pedía ayuda, miró con fastidio a la gente que los rodeaba, eran unos chismosos de primera que habían salido al escuchar el escándalo. Entró ellos estaba el que había convivido con su amigo antes, no estaba sólo, un chico de cabellos negros y cinta blanca en la cabeza lo acompañaba.

Ese desgraciado estaba grabando todo, parecía estar divirtiéndose.

━━ ¿Qué coño miráis? ━━ Insulto al público que no tardaron en cotillar entre ellos sobre lo grosero que era. ¿Pero como no serlo? Sentía que le habían roto el brazo izquierdo, el labio y para peor la nariz. Su preciada cara había sido arruinada por completo por unos matones de bajo nivel que no conocían ni en su casa. Era el peor día de su vida, sin duda.

Luzu regresó a su lado al poco rato, tenía una mejilla roja e hinchada debido a un golpe. Los matones no se habían conformado con él y lo golpearon cuando intento defenderlo, pero aún así no era nada comparado con lo que le hicieron a él.

Le extendió la mano para que se levantará y dudo unos segundos en tomarla. No tenía ánimos de tocar a Luzu, no por ahora que tenía tan reciente el recuerdo de lo que le dijo. Era un estúpido, no estaba seguro de que demonios sentía y aún así se le declaró sin pensar... Oh por los dioses, se había declarado al ser que más odiaba en el mundo.

Sin duda perdío la cabeza, la cordura, la lógica... ¿Este era la señal divina qué esperaba para volver a reunirse con Roxy?

━━ Wilson no tardará en llegar,vamos a ir a mi casa. ━━ Luzu lo ayudó a levantarse y aunque sentía que podía caminar sin mucho más que un pequeño malestar, se apoyó en sus hombros. Otra vez estaban cerca, aunque no parecía que le molestara, era como si lo que le dijo no le importara y no tuviera mayor impacto en él. No debía sentirse decepcionado, era mejor así, de todas formas se sentía rechazado. ━━ Mi padre tiene un médico personal, no dudará en llamarlo cuando te vea. ━━

━━ No... ━━ Miró el suelo avergonzado, ya demasiadas personas lo habían visto en tal estado. ━━ Llévame a mi casa, mis padres me llevarán al hospital y sabrán que hacer. ━━

━━ ¿Pero que dices? ━━ Luzu lo regaño. ━━ ¿Cómo planeas que te lleve si ni siquiera conozco donde vives? ━━

Se quedó callado unos segundos, era cierto. Nunca le decía a sus amigos donde estaba quedándose, después de todo era algo inútil porque al mes se habría mudado de nuevo por culpa de la extrema seguridad que tenían sus padres. Estos también le habían dicho de manera no muy sutil que no debía divulgar cosas tan personales como lo era su ubicación a los demás.

No sabía en que demonios estaban metidos sus padres pero tampoco le interesaba. No le interesaba nada de ellos.

La única persona que conoció una de sus casas era Quackity, pero ya se había mudado también de ese lugar hace mucho tiempo así que no había problema para mantener el rastro de sus padres tan invicible como siempre. Ah, y Lolito. Ella siempre sabía donde estaba.

¿𝘠𝘢 𝘯𝘰 𝘴𝘰𝘺 𝘵𝘶 𝘤𝘩𝘪𝘤𝘰 𝘧𝘢𝘷𝘰𝘳𝘪𝘵𝘰? #𝙡𝙪𝙘𝙠𝙞𝙩𝙮Where stories live. Discover now