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PDV CHIARA

En cuanto llegue a mi casa puse música y comencé a ordenar, siendo sincera no estaba tan mal, tenía unas pocas cosas fuera de lugar en la cocina, la cama destendida y el puto armario.

Si, el armario y yo seguíamos sin llevarnos bien. Se suponía que nos juntaríamos solo a hablar pero aún así decidí ordenar el armario porque me venía genial esa excusa para obligarme a hacerlo.

Por la noche cene algo tranquila pues no me apetecía mucho cocinar y me metí en la cama temprano. Aquello no era normal en mi pero la mañana siguiente quería despertarme temprano para estar con margen y asegurarme de no quedarme dormida.

Eran las 7 de la mañana cuando la primer alarma sonó, luego de quejarme un poco la apague y salí de la cama. Me puse una camiseta y salí de la habitación para ir a la cocina a asegurarme que no faltase nada, al fin y al cabo sabía los gustos de Violeta y quería que tuviese lo que quisiese para desayunar.

Luego de aquello salí al patio y tomé un poco de aire. Uno de mis sitios favoritos era ese patio, allí tenía un poco de verde y podía tomar aire cuando ir a otros sitios no era posible.

Cuando volví a entrar puse música de fondo en aleatorio para que llenará el lugar y me diera un poco de calma. No recuerdo muy bien que hice esas horas solo se que de repente sonó el timbre y yo aún no me había vestido.

-Ya voy - grite y fui corriendo a la habitación a ponerme un pantalón, medite si cambiarme la camiseta Pero con  la que llevaba no se notaba que no llevaba sostén así que no tenía de que preocuparme.

En cuanto abrí la puerta no pude evitar sonreír antes de darle paso.

-Hola Violeta, bienvenida, gracias por venir . -Dije y nos fuimos a sentar al sofá.

-Hola Chiara, gracias a ti por invitarme.

-No es nada... Si quieres podemos desayunar fuera o en la barra.

-¿Te parece fuera? Así corre el aire.

-Vale, está bien

- ¿ALPRO con cereales y miel? ¿O quieres otra cosa?

- Quiero lo de siempre.

-Vaale, si quieres puedes ir fuera que yo en nada estoy contigo.

-Gracias Chiara. - Por alguna extraña razón desde que habíamos definido tener esa conversación ambas nos llamábamos por nuestro nombre completo.

Prepare todo lo que necesitaba y salí para sentarme al lado de ella y pasarle su bowl.

-Gracias -Dijo y yo sonreí.

- A ti.

- ¿A mí? Pero ¿Por qué?

- Porque estás aquí y eso me hace ilusión.

-A mi también me hace ilusión estar aquí -Dijo y yo suspiré - ¿Por dónde quieres comenzar?

- Pues no sé Violeta. ¿Por qué ahora? Si ya has estado en Barcelona otras veces. ¿Por qué está vez si me has buscado?

-Porque ahora se que no te haré daño si estoy cerca tuyo.

- No me hacías daño cuando te fuiste.

- Yo creia que te lo haría, de hecho lo hice en cierto punto.

- No me dolió que no quisieras nada conmigo, si bien me había ilusionado, sabía que tenías todo el derecho de no elegirme. -Suspire y la mire a los ojos- Me dolió que te fueras, me dolió que negaras absolutamente todo lo que ocurrió. Me dejaste dudando de si había sido real o me lo había imaginado.

Odio que no te odio - KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora