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PDV CHIARA

Me desperté y Violeta no estaba a mi lado, escuché el ruido de la ducha y no dude nada en hacer aquello.

Fui directa al baño y en lo que entraba me iba desvistiendo, al fin y al cabo tampoco tenía muchas prendas que sacar.

— Kiki ¿Eres tu?

— ¿Quien va a ser si no? — Pregunté ya metiéndome a la ducha con ella.

Violeta se rió negando con la cabeza al verme allí y luego hablo.

— ¿Que haces aquí amor? Ya estaba por salir, creí que tardarias más en despertar ...

—Te echaba de menos y vine a buscarte

—Vaale —Se rio dejando un  beso en mis labios y al poco rato ya salimos ambas de allí para vestirnos y ponernos a desayunar.

—¿A que hora tienes el ave?

—En una hora creo, tendría que desayunar preparar todo y ya salir...

— Vale ¿Quieres que te acompañe a la estación?

—Como querer si, pero creo que lo mejor es que vaya sola, ya es raro que haya venido por tan poco tiempo.

—Tienes razón.... Te voy a echar de menos

—Y yo amor, pero tiene que ser así

—Lo se, creeme que lo sé.

Terminamos de desayunar y fuimos a la habitación para intentar terminar mi maleta. Siempre lo dejaba para lo último, aquello era algo que no me hacía mucha ilusión pero por suerte Violeta era muy práctica y en pocos minutos pudo acomodarlo todo.

—Pues ya está— Dijo mirándome

—Si, ya está — Respondí mirándola

— Lo tienes todo listo

—Si, está todo listo —Dije sin ser capaz de moverme

—Kiki, te tienes que ir... perderás el ave —Dijo en un tono distinto para que reaccionara.

—Ya, si eso. Tienes razón, lo siento. —Dije cogiendo la maleta y caminando hacia la puerta de salida pero frenandome en seco, no me iba a ir así. Solté la maleta y volvi a paso decidido a Violeta abrazándola y dejando un
beso en sus labios.

—Te quiero Vio, no se cuando nos veremos pero no lo olvides. Solo eres tú.

— Kiki... no empecemos que no te dejo ir más —Dijo con sinceridad dejando un beso en mi frente y pasándome las llaves que antes solía tener Denna- Por si vienes a Madrid en cualquier momento, mi piso es tuyo, incluso si estoy de gira o lo que sea y necesitas quedarte .

Luego de coger las llaves ya si salió de allí  para dirigirse a tomar el Cabify que la esperaba en la puerta e ir a la estación.

Sabía que iba a echar de menos Madrid y a Violeta, pero también sabía que debía regresar a Barcelona le esperaban las clases de la uni y un  album que armar, estaba muy ilusionada con aquello, tenía muchas ganas de hacer aquel proceso creativo y el hecho de poder mixtear los recursos que la ESMUC le podía proveer más lo que la discográfica le proveía hacia que tuviera más recursos que nunca para hacer aquello y podía jugar tanto como quisiese.

El viaje en ave fue tranquilo, lo paso escuchando música y escribiendo alguna que otra cosa, no era demasiado lo que había escrito pero como disparadores probablemente le sirviese en otro momento.

Al llegar a Madrid se encontró casualmente con Julieta quien también iba en el ave aunque allí no se había cruzado.

— Hola guapa...

Odio que no te odio - KIVIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora