Odio que no te odio - KIVI

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PDV CHIARA

En cuanto llegue a Madrid me dirigi al piso de Rus, ella me estaba esperando allí y cuando llegue se encontraba Aroa también, al parecer ellas ya habían podido hablar sus asuntos porque se las veía bien.

-Kiks amor que guay que estés aquí. -DIjo Rusli y nos abrazamos.

- Hola Kiki que guay verte. Cualquier cosa que necesites aquí puedes contar conmigo - Dijo Aroa y yo me acerque a ella para darle un abrazo también.

-Con que la cuides me basta- Le susurré al oído de forma disimulada para que solo ella lo escuchara.

-Ven, vamos a dejar tus cosas a tu cuarto y ya luego nos vamos a comer algo. Aroa tiene que ir a Universal y tú tienes una reunión por la tarde, si lo ves bien podemos ir  a la cafetería hasta que Aroa tenga su reunión y ya cuando se libera nos vamos a comer a algún sitio guay.

- Ah vale, que ya me has armado los planes y todo. -Dije entre risas- Me parece perfecto, no hay nada como las croissant de la cafetería de Universal.

-Tu buen gusto Chiara! -DIjo Aroa y yo sonreí.

Deje todas mis cosas en la habitación y luego volví con ellas y estaban tonteando como no podía ser de otra forma.
-¿Que pasa? ¿Por qué me miras así? -Le pregunto Ruslana.

- Es que me has puesto la carita de Bambi otra vez Rus. - Respondió Aroa y yo carraspee para que pillaran que estaba allí.

-Siento romper este momento tan íntimo pero me habéis prometido una croissant de Universal y no he comido nada en toda la mañana.

-Pues nos vamos -DIjo Rus y fue a por su móvil para que salgamos de allí.

El camino a las oficinas fue guay, íbamos escuchando música y hablando de momentos graciosos, me gustaba mucho ver a Rus así de feliz, era loquisimo porque hace no mucho tiempo ella no se veía capaz de volver a sentir esa clase de sentimientos hacia alguien y ahora estaba pilladisima.

Al entrar al edificio de la discográfica nos dirigimos a la cafetería y ya de lejos pude notar una silueta que me llamo la atención. Intenté ignorar mis pensamientos porque era imposible que fuese esa persona, pero cuando ví de quién estaba acompañada y que Leire estaba en una mesa cercana lo ví clarísimo, Ruslana actuó más rápido de lo que me habría gustado y para cuando quise darme cuenta estábamos en otro sitio del edificio.

Estaba en shock y no entendía nada, como esa persona podía estar ahí dentro y como Violeta podía estar con ella, es que encima parecían cómodas con la situación. Y Leire... Como Leire podía permitir eso. Al final iba a ser verdad que mi Vivi había muerto y la nueva Violeta ya no tenía nada de ella.

Cuando Violeta llegó e intento hablar conmigo Rus salto de una manera que me sorprendió. Claramente estaba molesta pero no me esperaba que a ese punto.

En cuanto se fue, me eche a llorar y Ruslana me abrazo. Aroa miraba la situación a distancia. Supongo que la mire buscando respuestas y encontré esa luz a la que aferrarme. En ese momento no sabía si era real o no pero en los ojos de Aroa ví una leve esperanza a qué aquello no fuera lo que creía.

-Chicas tengo una reunión ahora y estaré hora y media dos aquí. Vayan a dar una vuelta -DIjo mientras le pasaba las llaves de su coche a Rus - Chiara ahora mismo no puedo decirte nada pero solo te voy a pedir que utilices la cabeza. Conoces este mundo y sabes más de lo que crees si atas cabos igual puedas darte cuenta que nada es tanto ni tan poco. - En cuanto dijo eso Ruslana la miró molesta pero no iban a discutir allí.

Cuando quedamos solas, comenzamos a caminar hacia la salida y alguien me habló.

-Chiara, necesito hablar contigo.- Dijo Leire  y yo me frene en seco para girarme y acercarme a ella. Rus venía detrás mío pero Leire volvió a hablar- A solas