Pʀᴏʜɪʙɪᴅᴏ - [Yizhan]

第十一章 : Wang Yuan

Zhan despertó temprano, le había escrito a He Peng para que le dijera a su hermano que fuera a su casa. Se sentía mal por dejar que él entregue el niño a Yibo, pero no quería ni siquiera que supiera que era suyo. Ya tenía toda su documentación lista, no había ningún rastro de que el pequeño Wang Yuan era suyo y de Wang Yibo. Preparo al pequeño, dormía en su transportadora portátil.

En cuanto escucho el timbre miro por la ventana viendo al joven, le abrió indicándole que pasara, le explico detalladamente que debía ir a la dirección que le anotaba en un papel, junto con el pequeño y todas las cosas que había comprado para él. El hermano de He Peng al parecer entendió todo, tomando el bolso y al pequeño, quien estaba bien cubierto para que no tuviera frio, pero también para que pudiera respirar bien.

Ni siquiera quiso mirarlo una última vez.

El joven salió, sintiendo como Xiao Zhan cerraba la puerta a su espalda, camino hasta el auto que estaba oculto a media cuadra, viendo a su hermano preguntándole con sus gestos: ¿Qué paso?. Entro, dejando al pequeño con cuidado atrás junto con sus cosas. Se metió del lado del acompañante mirando a su hermano, quien seguía esperando que hablara. –Me dijo que llevara al niño a esta dirección –dijo a su hermano.

He Peng asintió, mirando la dirección que él le había proporcionado a Xiao Zhan. –Bien, se deshará del niño –dijo con una sonrisa. Él arranco el auto, yendo a la dirección que le habían dado a su hermano. Zhan le había pedido que su hermano se ocupara de esto, ya que pensaba que no sabía que estaba embarazado, y al parecer era de ese tal Yibo, quien fue su alumno, y con quien se acostó cuando los vio por la ventana ese día de lluvia.

He Peng sentía una enorme satisfacción, al saber que Xiao Zhan ni siquiera le había puesto su apellido al niño, sino el de ese tal Wang Yibo, quien ahora sería el único padre que tendría, ya que Zhan renuncio a su tenencia y potestad. Él pensó que era un idiota que no notaria su enorme vientre, pero lo hizo, y no dijo nada; Se notaba que Zhan no estaba muy apegado a ese niño, y mucho menos a su otro padre.

Vio en esto su oportunidad perfecta.

Xiao Zhan no tardaría en acercarse más a él, ya que le estaba haciendo aquel enorme favor para deshacerse de su hijo, y del otro padre. No podía evitar sonreír, sentirse feliz de que eso estuviera pasando. Supo desde el principio que siempre se trato de ese idiota, quien solo lo embarazo y se fue a correr carreras de motos por la ciudad, siguiendo su sueño de ser profesional. Zhan no era capaz de hacerlo renunciar para que ellos estuvieran juntos, ya que se noto que no sentía nada por ese Wang Yibo.

Ese Yibo se notaba que si sentía algo por la forma de mirarlo, pero no era mutuo, ya que a Zhan nunca se le escucho nombrarlo o decir algo bueno sobre él. He Peng investigo por su cuenta, descubriendo quien era ese que antes fue su alumno, quien ni siquiera siguió la carrera por la que entro a la universidad, y solo quería correr sobre su moto; Ni siquiera podía verlo como un rival, porque Zhan acababa de renunciar a lo único que tenían en común: el niño.