Pʀᴏʜɪʙɪᴅᴏ - [Yizhan]

第十七章 : Profesor Xiao

Xiao Zhan jadeo sintiéndose en el cielo, Yibo beso su cuello, apoyando su espalda contra la cama. El profesor seguía agitado, intentando mantenerse despierto, su anterior orgasmo lo había dejado cansado, hasta tal punto de que no podía mantener sus ojos abiertos. El corredor salió de su interior, acomodándose a su lado intentando recuperar el aliento, hacía tiempo que no lo hacía esta manera.

Sintió como Zhan giro su cuerpo desnudo casi pegándose a él, sintió sus caricias, como paso sus dedos por su cuello y pecho, él apenas tenía sus ojos abiertos. – No me dejes, no lo hagas –dijo en voz baja, casi suplicando, y no entendió porque. Yibo solo lo acaricio, dejando un beso en su frente, sentía en su corazón que había cedido muy rápido, muy fácil, pero nunca pudo olvidar que este profesor que estaba en su cama ahora era su debilidad.

Apenas podía luchar por lo que sentía, por como su cuerpo se agitaba por tenerlo así en su cama. El profesor Zhan suspiro cerrando finalmente sus ojos, rindiéndose al cansancio, él se quedó mirándolo dormir prácticamente pegado a su piel, lo observo por unos minutos; Después de un rato noto la hora, se levantó de la cama muy despacio y busco que ponerse, Fan Xing no tardaría en llegar con el pequeño Yuan y no sería bueno que lo viera en esta situación.

Cubrió bien a Xiao Zhan, procurando que ninguna parte de su cuerpo desnudo se vea, se colocó una camiseta y un pantalón y salió de la habitación, cerrando la puerta despacio. Limpio y ordeno todo cuanto pudo, dejando todo medianamente decente y prolijo, se sentó en el sillón de la sala, esperando a su hijo.

Explicaría otro día porque su otro padre estaba en su cama, desnudo y durmiendo, después de aparecer repentinamente luego de tanto tiempo, aunque no lo creía necesario. Quince minutos después, A-Yuan entro corriendo al abrir la puerta, mirando en todas direcciones. –Papi, papi, papi –dijo una y otra vez, hasta que lo vio en el sillón. Subió rápidamente y lo abrazo, siendo correspondido. El niño se aparto, mirando a su padre. – Papi, papi, ¿poque no vinite po mí?

Él rio suavemente. –Tuve que ocuparme de una cosa, por eso Fan Xing te trajo a casa –dijo. Fue una enorme casualidad que le enviara ese mensaje al niñero, minutos antes de que el profesor apareciera en la puerta; se suponía que no llegaba para buscar al niño, ya que debía ir hasta el autódromo pero se retrasó en otros asuntos, y justo llego su profesor y amante.

A-Yuan inflo sus mejillas formando un puchero mirando a su padre. – No hagas eso –dijo, desinflando sus mejillas con sus dedos, el niño se quejó volviendo a inflar sus mejillas, recordándole con ese gesto a cierta persona que comparte sangre con el pequeño, ese gesto fue heredado del profesor Zhan no había dudas.

Fan Xing apareció con la mochila del niño, cerrando la puerta que el pequeño dejo abierta acercándose a las dos personas en el sillón, camino hasta quedar a un lado de aquel mueble cómodo. – Estaba algo inquieto –dijo, mirando como el pequeño aún mantenía el gesto mirando a ambos, era adorable para muchos. – Quería llegar a ver a su papi.