El Hijo del Infierno

Disculpas

Velvette frunció el ceño con inquietud, dio un suspiro mirando a Stolas igual de inquieto. 

— Es que, tenemos que decirle. — Dijo finalmente y Velvette se quejó frustrada. 

— Ivan tiene mucho trabajo. Ni siquiera ha revisado su celular. Le dije a Husk que vigilará a Charlie y la protegiera en el peor de los casos. Si le decimos Ivan posiblemente corra al Hotel de su hermana para sacar a Alastor de ahí. Peor si Lucifer se entera. Después de lo que pasó pensé que Alastor no volvería a acercarse.

— Sí, pero si se entera de otra manera se enojara más. — Velvette le dio la razón a Stolas. — Además Lucifer protegió a Ivan, no a Charlie… no se pensó que Alastor fuera tan mezquino para posiblemente usarla contra Ivan. 

— Alastor debió saber que Charlie era un punto inflexible para Ivan. Está bien, hay que decirle. — Después de hablarlo un poco acordaron que Stolas se lo dijera mientras ella iba a la reunión con los demás Overlords. Incluso si Ivan va al hotel no encontrará a Alastor y así podría hablar con Charlie de ser necesario, esperaban que él pudiera hacerla entender. 

Tenían un plan, ¿No podía salir mal, verdad? 

Con eso en mente, Velvette dio un suspiro y se fue a la reunión. 

°

Alastor frunció el ceño ligeramente antes de sonreír al estar frente a él.

— Saludos Zestial. — El mencionado se rió un poco. 

— El clima se torna apacible esta tarde. 

— En efecto, podríamos tener lluvia ácida esta jornada. — Alastor sonrió siendo precavido con sus palabras sabiendo como era Zestial y sobre todo su favoritismo hacia cierto príncipe. 

— Si la suerte me ampara me deleitare con más gritos ¿Dónde has estado? Ha pasado una eternidad desde que nos deleitaste con tu presencia. Hay algunos contando cuentos salvajes sobre ti, cayendo en brazos divinos o incluso que caíste en lo más bajo al querer saciar deseos pecaminosos. — Alastor trato de no enojarse. 

— Ah jajaj solo tome un merecido sabático, nada serio. Aunque es divertido estar en boca de todos. — Sonrió más mientras hablaba, pero Zestial lo miraba atentamente. 

— También he oído rumores de tu cooperación con la princesa y su reciente viaje de fantasía, dime como caes en semejante sandez. Uno pensaría que te gustaría cosas, más…grandes. — Alastor se dio cuenta de los comentarios pasivo-agresivo. 

— Eso es personal pero sigan inventando teorías, amo las conspiraciones. — Sé rió mucho más. 

— Sería una sandez aún mayor asumir lo que estás planeando Alastor, has sido todo un enigma desde que te manifestante en este reino. 

— Si lo dice un veterano infernal como tu, lo tomó como un encantador cumplido. — Alastor sonrió pero estaba irritado. 

Todos estaban llegando, incluido Velvette y Husk. Hizo una mueca cuando vio a Vox cerca de los otros dos. Entrecerró los ojos un poco. Sabe que después de separarse Ivan apoyo a Vox, la única razón por la que no lo hizo antes fue por que a Alastor no le gustaba la tecnología. 

Apretó sus manos un poco antes de que todos tomarán su lugar, Velvette le dio una mirada molesta e irritada, él solo le sonrió burlón para el enojo de ella.

Carmilla tomó el mando como siempre. 

— Bienvenidos soberanos del infierno. Los e invitados aquí a todos por qué representan los poderes que gobiernan nuestra ciudad. Juntos poseen millones de almas. Almas en riesgo con las nuevas fechas de exterminio. Su Alteza el príncipe Ivan también tiene anuncios para nosotros. — Carmilla se detuvo al ver a Zestial y lo saludo con un asentimiento de cabeza. Aunque hizo una mueca al ver a Alastor. — ¿Alastor?